El tirón de la moda con ética

También se llama ‘moda sostenible o ‘slow fashion’ y tiene como objetivo crear una tendencia que ponga el foco en el cuidado del medio ambiente. Es una filosofía de diseño que busca reducir el consumo a través de la elección de prendas de calidad, que no sigan una producción en masa ni en países tercermundistas que no respetan los derechos de los trabajadores. Se trata de reducir el consumo y, de paso, cuidar el entorno.

En Counting Clouds se utilizan hilaturas naturales de lana y alpaca en invierno y de algodón en verano. Según explica su fundadora, Elena Garicano,—en la imagen sobre estas líneas con un niño en los brazos—, todas las prendas se tejen en dos máquinas tricotosas en un pequeño taller a las afueras de Madrid» a partir de sus diseños. Todas ellas se unen a mano, se lavan, se planchan y se etiquetan. «Este proceso lleva varios días y no podemos acelerarlo porque queremos que la calidad y la sostenibilidad sean lo primero», apunta.

Y es que muchas marcas están naciendo en los últimos años al calor de esta filosofía, que supone una alternativa a la moda rápida. El núcleo es siempre el cuidado del planeta como una forma de ser respetuosos con él. También entra en juego la trazabilidad de las prendas, que informa al consumidor quién, dónde y en qué condiciones se ha elaborado eso que lleva puesta. Gracias a este tirón, cada vez más personas optan por comprar prendas de mayor calidad y exclusividad, en detrimento de aquellas con precios asequibles pero realizadas en cadena y con materiales dañinos para el medio ambiente.