Un psiquiatra estadounidense alerta del mal diagnóstico de la depresión
El psiquiatra estadounidense Peter Kramer, profesor de la Universidad Brown de Nueva York, alertó ayer del mal diagnóstico y tratamiento que existe en la depresión, uno de los trastornos mentales más frecuentes en todo el mundo. Kramer, que está en España con motivo de la publicación por Seix Barrall de su libro titulado Contra la depresión , expresó en declaraciones a la prensa su preocupación por el mal uso de la medicación y dijo que sólo 1 de cada 8 depresivos recibe un tratamiento adecuado. Pidió que se considere la depresión como una enfermedad más que necesita tratamiento y ayuda médica como cualquier otra y afirmó que mata, no sólo por el incremento del suicidio que padecen quienes la sufren, sino también porque influye en todo el organismo en el incremento de las enfermedades cardiovasculares y otros problemas físicos. Los síntomas de la depresión son muy variados y causan una gran incapacidad, además de ser una enfermedad crónica, a la que en opinión del psiquiatra hay que alejar del mito que la asocia con un cierto romanticismo y con las ideas de que quienes la sufren pueden ser más creativos. Las causas Ahora se puede demostrar que la depresión tiene una expresión física real en el cerebro de los afectados y afirmó también que en un 38 ó 40% las causas de su desarrollo son genéticas, mientras que en el resto son ambientales o de otro tipo. También se ha demostrado que hay un porcentaje de gente, quizás hasta un 20% de la población, que tienen unos genes protectores y que están como blindados contra esta enfermedad. El psiquiatra afirmó que aunque todos podemos encontrarnos muy mal por algún acontecimiento muy triste que nos pase en la vida, lo normal es irse recuperando, mientras que los depresivos se encuentran siempre en este momento inicial. Subrayó la importancia de los tratamientos que logran aminorar los síntomas y que los depresivos se encuentren mucho mejor, pero consideró que habría que investigar más y lograr medicinas que pudieran prevenir los brotes depresivos en el cerebro de los afectados. La depresión puede darse en todas las edades.