Diario de León

León cumple los requisitos para normalizar el covid a partir del lunes 28 de marzo

La pandemia entra en una nueva etapa que suprime los aislamientos a personas asintomáticas y leves Las pruebas sólo para colectivos vulnerables y de riesgo

Las pruebas de covid que han marcado dos años de pandemia dan un paso atrás en la nueva fase de control del virus. FERNANDO OTERO

Las pruebas de covid que han marcado dos años de pandemia dan un paso atrás en la nueva fase de control del virus. FERNANDO OTERO

León

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Bajo la condición de que los recursos asistenciales estén en riesgo bajo, a partir del lunes se eliminarán los aislamientos de personas asintomáticas y con síntomas leves de covid. Así lo acordó ayer la Comisión de Salud Pública del Ministerio de Sanidad en su reunión con las consejerías de las comunidades autónomas.

Según los últimos datos de la Consejería de Sanidad de Castilla y León, actualizados ayer por el portal de Transparencia de la Comunidad, la provincia de León cumple estas condiciones: no superar el 5% de camas ocupadas por covid en planta y el 10% en UCI. Tanto la hospitalización en planta como en cuidados críticos se encuentra en riesgo bajo, con unos niveles de ocupación del 3,87% de las camas disponibles en planta y el 5,26% de las plazas en UCI ocupadas por pacientes covid.

En Castilla y León, a día de ayer, las provincias de Burgos, Palencia y Zamora tienen indicador de riesgo moderado en la ocupación de camas UCI o planta o ambas por covid, mientras que el resto de la Comunidad está en riesgo bajo. La Comisión de Salud Pública dio luz verde ayer con este acuerdo a la nueva estrategia que normalizará la covid a partir del próximo 28 de marzo, cuando se eliminarán los aislamientos de las personas asintomáticas y dejarán de hacerse pruebas con carácter general. Así lo han decidido finalmente los directores generales de Salud Pública del Ministerio de Sanidad y de las comunidades en una reunión en la que han establecido que a partir de esa fecha las pruebas diagnósticas se centrarán en personas (mayores de 60, inmunodeprimidos y embarazadas) y ámbitos vulnerables (sanitarios y sociosanitarios), así como casos graves, en los que se focalizará a partir de ahora la vigilancia.

Mientras que el diagnóstico de pacientes con sintomatología leve compatible con covid-19, por su parte, se dejará a criterio del profesional, de manera que se realizará según las necesidades de manejo clínico del mismo.

En esta nueva etapa de la pandemia que está a punto de comenzar, los casos confirmados leves, y también los asintomáticos, no tendrán que hacer aislamiento ni los contactos estrechos cuarentena -que en ambos casos es de siete días-, pero se les recomendará hacer uso de medidas preventivas como la utilización de mascarilla en todos los ámbitos y evitar contacto con personas vulnerables. Los centros sanitarios asistenciales o sociosanitarios, por su parte, podrán implementar medidas específicas de aislamiento y control.

A falta de que se publique el texto, la estrategia mantiene un aislamiento en residencias de cinco días, que se levantará si el quinto transcurre sin sintomatología, aunque los trabajadores deberán tener además una prueba de antígenos negativa, según señalan a Efe fuentes de este órgano.

Igual que los pacientes hospitalizados, que también tendrán que aislarse cinco días y tener un test negativo. La Comisión de Salud Pública justifica estos cambios en que los altos niveles de inmunidad -el 92,3 % de los mayores de 12 años han completado la pauta y más del 91 % de los mayores de 60 tienen la dosis de refuerzo- han determinado un cambio en la epidemiología de la covid que permite una transición hacia una estrategia diferente, focalizada en personas y ámbitos vulnerables y casos graves.

De momento, ambos criterios siguen cumpliéndose a nivel general: según los últimos datos publicados hoy mismo por el Ministerio de Sanidad, la incidencia a 14 días sigue estancada aunque, tras una semana de subidas, ha bajado nueve puntos hasta los 436 casos por cada 100.000 habitantes, al tiempo que la carga hospitalaria se sigue reduciendo, tanto en las ucis (6 %) como en planta (3,7 %). Pero no en todas las comunidades, ya que Canarias cuenta con un 7,11 % de camas covid y Cataluña roza el 12 % de ingresos en las Unidades de Cuidados Intensivos con estos enfermos.

control de cambios

Con todo, la nueva forma de controlar la pandemia estará vigente mientras no se produzca «un cambio significativo» en la tendencia que apunte a una circulación no controlada a un cambio en la situación epidemiológica que requiera restaurar medidas de vigilancia y control a propuesta de la Ponencia de Alertas y Planes de Preparación y Respuesta. Y la idea es que se prolongue hasta que se implemente del todo el sistema centinela de vigilancia de infecciones respiratorias agudas similar al de la gripe y que, tal y como se comprometieron la ministra Carolina Darias y los consejeros hace un par de semanas en la llamada «declaración de Zaragoza», se pondrá en marcha antes del primer trimestre de 2023.

En este tiempo se mantendrán operativas las estructuras extraordinarias de vigilancia y control puestas en marcha durante la pandemia para monitorizar indicadores clave que permitan detectar precozmente cambios en la situación que puedan requerir reimplantar medidas de control, en coordinación con el Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC).

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