Diario de León

TRIBUNA

Defendiendo el periodismo de rigor

Publicado por
Pedro Lechuga Mallo Presidente de la Asociación de Periodistas de León (APL)
León

Creado:

Actualizado:

H oy 24 de enero los periodistas conmemoramos la festividad de nuestro patrón San Francisco de Sales, una fecha de celebración en la que es necesario hacer una reflexión sobre la situación actual del periodismo, una de las profesiones que más duramente ha sido castigada por la crisis.

Valga como dato significativo que el paro entre profesionales del periodismo en 2016 es un 74% superior al que registrábamos en 2008. Estas cifras nos dan una idea preocupante de nuestro sector, ya que no sólo significan que miles de compañeros no encuentran trabajo sino lo que es igual de alarmante, nos demuestra que la salud de nuestra sociedad democrática no está en sus mejores momentos, ya que cuantas más voces plurales y medios de comunicación libres haya en un país, más capacidad tendremos toda la ciudadanía de conocer la verdad de lo que nos rodea.

Si bien es cierto que las cifras del paro en los últimos 8 años son muy negativas, también debemos mencionar como nota positiva que este 2016 se han reducido un 9% los desempleados respecto a 2015, un descenso que aunque pequeño, ya venimos constatando los últimos años, por lo que debemos también ser optimistas y seguir trabajando para que poco a poco el mayor número de compañeros posibles consigan reincorporarse al mercado laboral.

A este respecto es necesario destacar que gran parte de la responsabilidad de este descenso del paro está provocado por las nuevas tecnologías, un campo donde los periodistas estamos encontrando nuevas posibilidades para desempeñar nuestra labor profesional.

Aunque no podemos olvidar que la otra cara de la moneda de las nuevas tecnologías respecto al periodismo es devastadora, ya que han fomentado y facilitado el intrusismo con la aparición masiva de periódicos digitales que en realidad no lo son y la proliferación de las redes sociales como canal de comunicación. Tenemos que luchar y esforzarnos por alertar a los ciudadanos la diferencia entre un medio de comunicación respaldado por la experiencia y conocimiento de periodistas y aquellas otras plataformas que aportan información de una manera indiscriminada, sin contrastar y en muchos casos con finalidades interesadas y muy alejadas de la verdadera esencia del periodismo, que no es otra que contar al público lo que el periodista ve y escucha a su alrededor, apoyándose en su experiencia y conocimientos del entorno.

Y si al intrusismo le unimos la precariedad laboral que sufren muchos de nuestros compañeros en sus puestos de trabajo, nos encontramos con una situación en la que es necesario levantar la voz y reclamar a los responsables de los medios de comunicación que garanticen unas condiciones dignas y óptimas a todos los periodistas para que puedan desarrollar su trabajo de la mejor manera posible. Así conseguiremos que los medios y los periodistas volvamos a ganar la credibilidad que hemos perdido en los últimos años, en ocasiones por factores externos a nuestra profesión y en otras por causas internas y de las que debemos también hacer autocrítica.

Como ejemplo de las prácticas que tenemos que denunciar en nuestro sector es la cada vez más común mezcla entre información y publicidad, ajena a la decisión de los periodistas y de la que también somos víctimas al igual que los consumidores de los medios de comunicación.

El lector, oyente y espectador debe saber cuando algo es información y cuando una empresa o institución ha pagado por ese espacio. Para ello siempre había existido el formato llamado «publirreportaje», pero por desgracia son cada vez más numerosos los medios que evitan poner ese nombre a espacios informativos contratados y pagados por empresas e instituciones.

Este fin de semana la Asociación de Periodistas de León ha sido la anfitriona de la entrega del IV Premio Internacional Aymeric Picaud de periodismo divulgativo del Camino de Santiago, un galardón que tiene como principal objetivo promocionar y defender el periodismo de rigor, fiable y objetivo.

Y es precisamente en la defensa de este periodismo en la que tenemos que centrar todas nuestras fuerzas, por este motivo tenemos que luchar sin descanso por este tipo de periodismo, ya que será el único camino que nos llevará a los periodistas a sentirnos personal y profesionalmente realizados y lo que es más importante, a conseguir que nuestra sociedad sea mejor y que los ciudadanos tengan a su disposición información rigurosa, fiable y objetiva.

Y finalizo de la misma manera que en el acto de entrega del IV Premio Internacional Aymeric Picaud, diciendo que al igual que todos sabemos que Santiago de Compostela no es el final del camino, sino el principio, os animo a que cada uno de nosotros comencemos nuestro camino personal hacia el rigor, porque también será el principio de un futuro esperanzador.

tracking