Albares compró la finca con la expropiación para la A-6
La Casa del Obispo y la Huerta Grande fueron adquiridas por d. Antolín López Peláez, arzobispo de Tarragona, que la utilizó como finca de verano en la comarca del Bierzo. A su muerte pasó por herencia a sus familiares hasta que en los años 70 fue adquirida por el académico de la Real Academia de la Lengua Valentín García Yebra.
La construcción de la autovía A-6 generó una cuantiosa indemnización para la junta vecinal de Albares de la Ribera, por lo que se decidió adquirir esa propiedad para uso del pueblo.
Tras valorarse los terrenos de la era que fueron ocupados por la autovía en 180.000 euros y sumando esfuerzos del vecindario y la junta vecinal, la finca fue adquirida por un importe de 240.000 euros. Ahora la pedanía busca un revulsivo con este proyecto.