«LM rechaza pedidos de clientes que quieren que las palas se fabriquen aquí»
El presidente del comité de empresa de LM lamentó ayer, una vez más, los planes de la empresa para trasladar la producción de la factoría de Ponferrada a otras plantas. Gabriel Garnelo aseguró incluso que la empresa «está rechazando el pedido a clientes que quieren que se hagan aquí, y lo sabemos por boca de los propios clientes», afirmó.
Garnelo aseguró que al menos en tres ocasiones, LM habría rechazado pedidos en estas circunstancias, y que en una más «la empresa Alston presionó para que se siguiera haciendo aquí una pala del 48 o se la quedaban», añadió.
El comité de empresa entiende que «es evidente que en este momento no quieren producir aquí» y todavía hay trabajo «no para mantener a los 1.200 trabajadores que éramos, pero sí para los trescientos actuales», aseguró. De esos 305 operarios, un centenar se quedó fuera del último expediente regulador, a pesar de que se habían inscrito voluntariamente, en vista del progresivo desmantelamiento de la factoría.
Garnelo permanecerá movilizado todo el día de mañana —el comité de empresa ha solicitado autorización a la Subdelegación del Gobierno para mantener la concentración de forma permanente a las puertas de la factoría de Santo Tomás de las Ollas— para protestar por la salida de un nuevo molde de fabricación con destino a Castellón.
El presidente del comité de empresa también lamentó ayer el «hermetismo» de la dirección de la empresa sobre los planes que la multinacional danesa de palas eólicas tiene para la fábrica de Ponferrada, instalada hace una década, después de que el Ayuntamiento de Ponferrada modificara su Plan General de Ordenación Urbana para que ocupara una parcela tras talar parte del pinar.