Homenaje por arreglar las iglesias
El Bierzo Oeste despide a su joven párroco, trasladado a San Ignacio.
En el centro, el sacerdote José Antonio Prieto, ayer en La Portela con sus feligreses.
Es uno de los sacerdotes más jóvenes de la provincia de León, apenas un treintañero, y durante los últimos años ha dejado huella entre los creyentes de los cuatro municipios del Bierzo Oeste a los que servía por su preocupación por recuperar el patrimonio de una veintena de parroquias. Tanto es así, que, a punto de dejar su labor en los municipios de Vega de Valcarce, Trabadelo, Barjas y Balboa para incorporarse al seminario menor del colegio diocesano de San Ignacio en Ponferrada, algunos de sus feligreses se reunieron ayer con José Antonio Prieto Flórez para celebrar una comida de despedida en el Hotel Valcarce de la localidad de La Portela.
A Prieto se le reconoce, sobre todo su preocupación por recuperar el patrimonio de las parroquias, desde la iglesia de Santa María Magdalena y su retablo de 1646, en pleno Camino de Santiago en Vega de Varcarce y convertido ya en lugar de parada de numerosos peregrinos, hasta abarcar prácticamente todos los templos de las localidades a las que atendía.
«Ha acabado con las goteras, las ha limpiado, ha pulido los dorados, ha hecho un trabajo increíble», contaba ayer a este periódico una de las organizadoras de la celebración, Consuelo Samprón.
José Antonio Prieto Flórez se incorporará al nuevo seminario menor que funcionará en el colegio de San Ignacio después de haber sido elegido para ello por el Obispado de Astorga. El sacerdote tiene previsto incorporarse a su nuevo puesto a principios de junio, aunque todavía tendrá tiempo de despedirse de sus feligreses en las iglesias en las que oficia.