Viñas del Bierzo cumple 50 años con una facturación de 1,2 millones, un 20% más

La cooperativa Viñas del Bierzo de Camponaraya conmemoró ayer, con una serie de actos y con la presencia de buena parte de sus socios fundadores, los 50 años desde su puesta en marcha. Fue momento de hacer balance y de poner por delante los retos a los que se enfrenta la sociedad vinícola con más solera de la comarca, a la que están asociados más de 900 viticultores. Hasta ahora y pese a la crisis que todo lo empaña, las cosas marchan bien en Viñas del Bierzo, incluso mejor de lo previsto. A falta de casi tres meses para el cierre del ejercicio cooperativo —será el 31 de agosto— las ventas se han incrementado un 20% con relación al año anterior, tal y como detalló el presidente de la cooperativa, Vicente Barrio, quien además reconoció que se había solicitado un expediente de regulación temporal para dos trabajadores «en previsión de problemas», pero que teniendo en cuenta las cincunstancias «no sólo hemos desistido del ERE, sino que hemos tenido que contratar a más personas —son diez trabajadores— porque estamos desbordados por el éxito de nuestro producto».

En términos absolutos, el incremento de un 20% en las ventas se traduce en unas 100.000 botellas más y en una facturación total que ronda los 1,2 millones de euros, según explicó el gerente de la sociedad vinícola, José Luis Núñez. «Estamos contentos con el ritmo de ventas, no podemos quejarnos, y aunque no va a ser un año espectacular, sí mejor que el año pasado. Estamos trabajando a tope y en la bodega queda ya muy poco vino», añadió.

La previsión es dar salida a unas 700.000 botellas y de momento Viñas del Bierzo está apunto de sobrepasar ya el medio millón. «Quedan los meses más fuertes: junio, julio y agosto», detallo Núñez.

Entre los asistentes a los actos de conmemoración del cincuentenario de la cooperativa estaban el presidente de Enoturismo en el Bierzo, Víctor Robla; el jefe del Servicio Territorial de Agricultura, Fidentino Reyero; y el presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Bierzo, Alfonso Arias, que aprovechó el acto para llamar a los viticultures una vez más a la unidad. «En la unión está la fuerza», resumió. Arias se refirió también a uno de los males que acechan a las viñas, los conejos de la vid. Una plaga que de momento parece estar controlada pero sobre la que pesa una vigilancia constante custodiada ahora por los propios ayuntamientos con la aprobación de ordenanzas que obliguen a desbrozar las fincas en poulo.

Por su parte, Reyero adelantó que el miércoles se reunirá con los agricultores bercianos para poner en marcha la campaña de prospección de este año contra el fuego bacteriano, que de momento está controlado.