BIERZO
La comarca aseguró contra las heladas sólo el 4% de frutales con marca de calidad
Por segundo año consecutivo, la cobertura para esta contingencia es simbólica.
Los frutales bercianos adscritos a las marcas de garantía no están cubiertos ante el riesgo de heladas primaverales.
Los fruticultores del Bierzo volverán a tentar a su suerte este año. Y es que, por segunda temporada consecutiva, los profesionales del campo bercianos, con plantaciones de variedades frutales adscritas a alguna marca de garantía -pera conferencia y manzana reineta- han decidido mayoritariamente no suscribir seguros para cubrir las pérdidas que les puedan ocasionar las heladas primaverales.
Y es que sólo quince hectáreas de las más de cuatrocientas incluidas en las marcas de calidad han decidido suscribir las pólizas para estar protegidos contra esta contingencia climatológica.
«Nosotros, hasta el pasado día 10, cuando se cerró el plazo para contratar estas pólizas, hemos asegurado quince hectáreas de las más de 400 que controlan los consejos», precisa Pablo Linares, técnico de la DO Manzana Reineta y de la Marca de Garantía para la Pera Conferencia.
Estas pólizas fueron tramitadas a través de la Asociación Berciana de Agricultores (ABA), mientras que desde Asaja, su secretario regional, José Antonio Turrado, manifestaba que «en esta temporada no hemos tramitado ninguna póliza para cubrir los efectos de las heladas».
La razón del abandono de este tipo de pólizas por parte de los fruticultores bercianos no es otro que la eliminación hace dos años de las ayudas que concedía la Junta de Castilla y León para fomentar este tipo de contrataciones.
«El precio se elevó en torno a un 30% al desaparecer las ayudas a la contratación de estos seguros integrales», precisa Linares, para el que resulta «muy difícil concretar más cuánto ha supuesto para el bolsillo del agricultor, porque depende de muchos factores, como la variedad de fruta que se contrata y demás».
Desde Asaja se confía en que estos datos hagan recapacitar a la Junta de Castilla y León, máxime cuanto el siniestro, si llegase a producirse, tanto por bajar de cero el termómetro como porque las lluvias impidiesen el cuajado del fruto, sería generalizado en la comarca.