Ponferrada implanta la zona naranja para aparcar que fracasó en León

 

El concejal de Tráfico del Ayuntamiento de Ponferrada, Aníbal Merayo, fija un plazo de dos o tres meses para la implantación de la zona naranja de aparcamiento en la capital berciana, una iniciativa probada ya en León capital que ha fracasado estrepitosamente.

“Necesitamos los informes técnicos de servicios jurídicos, económicos y contratación, después tiene que pasar por una comisión y ser definitivamente ratificado en un pleno, por lo que podemos estar hablando de un plazo de entre dos y tres meses”, añadió el concejal de Ponferrada.

Merayo destacó que el bipartito quiere que esté listo para el Mundial de Ciclismo porque “es necesario” y que confían en que sea ya la “modificación y reforma definitiva” de este servicio que fue adjudicado hace un año a la empresa Dornier y aún quedan nueve años de contrato por delante. “Lo que pretendemos es corregir los errores que se cometieron cuando fue la adjudicación porque hubo calles que quedaron aisladas, y porque nos están demandando sus vecinos que se incorporen ya que ahora no tienen derecho a tarjeta de residente”, explicó.

Así, a la espera del informe definitivo, Merayo explicó que la previsión es incorporar a la zona naranja esas calles y las plazas de baja ocupación de la actual zona azul como, por ejemplo, las del entorno de Navaliegos y la avenida del Castillo -en el tramo del puente de García Ojeda-. La zona naranja que permite un mayor tiempo de aparcamiento a menor coste -2,80 euros por ocho horas-, precisó el concejal, serán plazas de aparcamiento intermedias entre la zona azul y las de libre aparcamiento.