ponferrada
El colegio Campo de los Judíos se echa a la calle para que la Junta agilice las obras
La Ampa exige garantías por escrito de la reapertura del centro en septiembre.
El portavoz del Ampa del colegio Campo de los Judíos, Pedro Jato, se dirigía ayer a los manifestantes en la glorieta de Correos.
Pedro Jato, portavoz de la Asociación de madres y padres del colegio Campo de los Judíos, les contó ayer un cuento a los niños. Lo hizo megáfono en mano, delante de la escultura de un rey y de un obispo, en la glorieta de Correos de Ponferrada, y en mitad de la manifestación que ayer ocupó la avenida de América de Ponferrada durante algo más de media hora para reclamar a la Junta de Castilla y León que garantice «por escrito» la reapertura en septiembre del centro escolar cerrado hace cinco semanas tras la aparición de una fisura en el suelo de una de las aulas del segundo piso.
El cuento de Pedro Jato hablaba del ogro de la burocracia y de los duendes que pueden mantenerlo a raya si se les empuja a ello. Y era, claro, una metáfora de lo que ha pasado en el colegio donde estudia su hijo desde que el 13 de mayo, las autoridades educativas —los duendes con poderes mágicos— optaron por evacuarlo y acomodar a los aproximadamente ciento sesenta alumnos en las escuelas de La Puebla, al otro lado del río, y sin embargo han tardado cinco semanas en confirmar que las obras urgentes para reforzar la estructura del centro las llevará a cabo este verano la Consejería de Educación. «Que esos duendes empleen su magia para que os devuelvan vuestro colegio y podáis empezar el curso el año que viene», arengó Jato, a pleno sol, y con los autobuses urbanos detenidos en la glorieta, aguardando a que terminara su intervención.
La Ampa del colegio ponferradino cumplía así con su intención de manifestarse a pesar de que la Junta confirmaba por fin el martes, después de muchos titubeos, que se encargaría de las obras. Los padres desconfían, sin embargo, del «compromiso verbal» de la Dirección Provincial de Educación y se echaron ayer igualmente a la calle, con sus hijos sosteniendo pancartas y globos, porque reclaman a la administración que garantice «por escrito» que el 11 de septiembre los niños volverán a su colegio, explicó Jato a los periodistas. Jato aseguró que Educación no descarta que pueda haber retrasos en la finalización de las obras si los técnicos detectan deficiencias más graves.
El intento a última hora de desmovilizar a los padres, con dos inspectores de Educación aguardando a las 13.00 horas a la salida de los niños del colegio La Puebla para reiterarles el anuncio de la Junta, tampoco surtió efecto y la manifestación salía minutos después del Campo de los Judíos, en medio de un ambiente festivo, un sol de justicia, globos de colores, y gritos infantiles; «ole, ole, ole, queremos nuestro cole», se oyó por toda la avenida de América.