El mecenazgo popular da alas a la Reserva de Palacios de Compludo

El proyecto «Alas para Palacios de Compludo» está cumpliendo su propósito. En una semana, la iniciativa que promueve la Sociedad Española Ornitológica (SEO-BirdLife) para mejorar la conservación de la Reserva Ornitológica de Palacios de Compludo ya ha recaudado 3.095 euros, gracias al donativo de casi 70 mecenas. El dinero se acerca a los 4.700 euros necesarios para lograr el objetivo final; crear dos nuevas charcas para anfibios, colocar cinco cajas nido para rapaces nocturnas y otras cinco para murciélagos y plantar doscientos árboles frutales autóctonos. Esto ayudaría a la mejora de las instalaciones del hábitat para la fauna presente en la reserva.

La campaña de micromecenazgo para la conservación de las más de novencientas hectáreas del territorio de Palacios de Compludo, se está realizando a través de la página web verkami.com. Esta es una iniciativa para que los ciudadanos abonen cantidades desde cinco a 500 euros para que el proyecto se convierta en realidad. Todo ello ha sido posible gracias al trabajo del Ayuntamiento de Ponferrada, SEO-BirdLife y miles de voluntarios y colaboradores de una iniciativa ejemplar de custodia del territorio y conservación de la Cordillera Cantábrica.

Respecto a esta nueva idea de subvención, desde la Asociación de Estudios Ornitológicos Tyto Alba, Miguel Rancaño afirmó que «es algo reciente que está cambiando la financiación». Rancaño añadió que «los pequeños proyectos hacen grandes cosas» y destacó que Seo-BirdLife promueve su iniciativa fundamentalmente a través de las redes sociales. Las personas que colaboren en el proyecto recibirán a cambio del donativo un obsequio que va ligado a la cantidad aportada, desde un certificado de colaboración con el proyecto, visitas guiadas por la reserva o pernocta, hasta un conjunto de regalos que incluyen una cena en el albergue de la Asociación Tyto Alba.

Las reforestaciones, la creación de las charcas y la colocación de las cajas nido, se realizarían entre otoño e invierno, a excepción de los nidos de murciélagos que habría que colocarlos antes de finalizar el verano.