El concurso de acreedores de Cyes pone en duda la construcción del dique del Sil

Sucedió con las obras de la avenida de Astorga, el principal acceso a Ponferrada. Y está ocurriendo de nuevo con la construcción del polémico dique del Sil. Los problemas económicos que arrastra la empresa adjudicataria del proyecto, —la constructora valenciana Cyes Infraestructuras, que esta semana presentaba una solicitud de concurso voluntario de acreedores en el Juzgado de lo Mercantil número uno de Valencia— pueden poner en peligro la ejecución del encauzamiento del río a su paso por el barrio de Flores del Sil, contratado esta primavera por un importe de 1,7 millones de euros y cuyos trabajos debería haber comenzado a principios de julio, según los planes de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil.

La constructora valenciana, que no ha logrado un acuerdo para refinanciar la deuda de 16 millones de euros que mantiene con distintas entidades bancarias, según informa la prensa levantina, ya ha interrumpido obras que tenía en marcha en Valencia como el centro de mayores de Moteolivete. En Valencia, la concejala de Bienestar Social e Integración, Ana Albert ya se ha reunido con los responsables de la constructora, pero el juzgado deberá nombrar ahora un administrador concursal que actuará de intermediario.

El futuro administrador también tendrá sobre la mesa la situación de las obras del dique del Sil, donde una parte de los vecinos del barrio de Flores del Sil se opone al trazado del encauzamiento, y donde es necesario concluir y certificar los trabajos antes del 31 de diciembre de 2015 para no perder la subvención de los fondos europeos con la que se financia la mayor parte del presupuesto.

El plazo para finalizar las obras se puede convertir en un obstáculo para que la CHMS opte por rescindir el contrato —algo con lo que ya ha advertido a la constructora, que podría perder la fianza— y readjudicar de nuevo los trabajos, como hizo en su día la Junta de Castilla y León con el proyecto de la avenida de Astorga.

Cyes Infraestructuras nació en 1979 como constructora especializada en obras de ámbito portuario. Imputados sus responsables en la presunta financiación ilegal del PP valenciano junto a otros empresarios del sector de la región, informa El País , la constructora había tratado de diversificar su actividad para esquivar la crisis económica, implantándose en Europa del Este, Latinoamérica, Norte de África y Oriente Medio.

Cyes se había hecho con el contrato para construir el dique ofertando una rebaja del 40 por ciento sobre el presupuesto base de licitación, de 2,8 millones de euros. La constructora acababa de despedir a 91 trabajadores y suspender temporalmente a otros 26.