La empresa priorizará la antigüedad a la hora de mantener trabajadores

Uno de los principales objetivos que se había marcado la representación de los trabajadores en la negociación abierta con la empresa se ha recogido en este principio de acuerdo. Éste no era otro que lograr blindar a la plantilla de trabajadores —en torno a los 200 operarios— que se han mantenido en la empresa en los momentos de mayores dificultades por los que ha atravesado la factoría de Santo Tomás de las Ollas —en los tiempos de bonanza llegó a superar el millar de empleados—.

En este principio de acuerdo, la empresa reconoce que «respetará la antigüedad de la plantilla en caso de producirse una baja de producción en los próximos años», explicaba el secretario comarcal de CC OO, Ursicino Sánchez.

Esta era una de las ‘líneas rojas’ que los trabajadores se habían marcado como infranqueables en el proceso de negociación con la dirección de la empresa, y que finalmente, LM decidía incluir en su última propuesta.

Desde la representación de los trabajadores, en todas sus manifestaciones públicas, siempre apostaron por «garantizar en primer lugar la estabilidad laboral de la planta».

Sólo la mediación del director general de Industria consiguió reconducir unas negociaciones que se habían roto este martes por la distancia que separaba las posiciones de ambas partes.

Esta ruptura en la negociación de las condiciones laborales de la factoría ponferradina de LM, que desde el comité de empresa siempre se desligó del proceso de contratación de 350 nuevos trabajadores, llegó a sembrar de inquietud a la sociedad ponferradina. Y entre ellos a los responsables políticos del Ayuntamiento de la capital berciana, que, a través de su responsable de Desarrollo Económico, Emilio Cubelos, hizo un llamamiento al entendimiento para no llevar al traste el resurgir de esta factoría eólica.