Las piscinas del campus estarán abiertas más allá del martes

Era el principal objetivo del nuevo equipo de gobierno del PP dirigido por Gloria Fernández Merayo y parece haber encontrado un resquicio legal que, al menos de momento, paraliza la liquidación y extinción del consorcio que regula la gestión de las instalaciones deportivas del Campus de Ponferrada, decidida en una reunión que —según el concejal de Deportes y Juventud, Roberto Mendo— no se convocó en tiempo y forma, por lo que las decisiones en ella adoptadas quedarían anuladas de «pleno derecho». Además, según la información ofrecida ayer por el mismo edil, no se han cumplido con unos pasos intermedios que es necesario dar antes de la extinción definitiva, entre ellos, la presentación de las cuentas. «Tienen que publicarse las cuentas y nosotros no hemos tenido acceso a ellas. De momento nadie las ha visto, no sabemos como están», dijo Mendo.

Por lo tanto, habrá que esperar a que se constituya formalmente el nuevo equipo de gobierno en el pleno de organización y a partir de ahí habrá que reiniciar el proceso para que la reunión del consorcio con la Universidad de León sea convocada en tiempo y forma y no «por teléfono y demasiado urgente» como se hizo, explicó el concejal, y se publiquen las cuentas. Esto da un plazo de dos o tres meses al Ayuntamiento de Ponferrada para buscar una solución y la mejor fórmula de gestión, una vez que el rector de la ULE se ha mostrado a favor de mantener las instalaciones abiertas pero desentendiéndose de la gestión. Durante este tiempo — dijo Mendo— los trabajadores seguirán cobrando.

Por su parte la alcaldesa, Fernández Merayo, aseguró ayer en Dehesas que el equipo de Gobierno que ha confeccionado «va a ser suficiente para sacar esto adelante y devolver la vitalidad a Ponferrada».