Páramo ampliará la red de bocas de incendio para garantizar la seguridad
Destinará más de 40.000€ a renovar las existentes y colocar otras nuevas en todos los pueblos.
maría carro | ponferrada
El Ayuntamiento de Páramo del Sil invertirá en la lucha contra posibles fuegos en los cascos urbanos del municipio con la renovación o colocación de «tantas bocas de incendio como sean necesarias» para poder afrontar con celeridad cualquier contratiempo y garantizar, así, la seguridad de los vecinos. Lo hará con fondos del Plan Especial de Infraestructuras y Redes de la Diputación Provincial del León, por el que a Páramo del Sil le corresponde 140.000 euros que también se invertirá en el asfaltado de algunas calles y la renovación del último tramo de tuberías de fibrocemento, según explicó ayer el alcalde, Ángel Calvo, detallando que el Ayuntamiento dará prioridad al plan contra incendios y que a ello destinará tantos fondos como sean necesarios. En todo caso, fija la inversión en torno a los 40.000 euros y el fin de su ejecución de cara al mes de marzo del año próximo.
«Vamos a colocar bocas de incendio y a dejar mangueras en todos los puntos para poder acceder a cualquier casa de cualquier núcleo urbano lo antes posible. No sólo se va a instalar una boca por pueblo, sino tres o cuatro o las que sean necesarias», explicó Ángel Calvo. Para ello, el proceso de tramitación comenzará una vez termine el mes de agosto. «Si somos capaces de hacer el trámite pasado agosto, igual para marzo ya está ejecutado», aseguró, explicando que si tiene que prescindir del asfaltado de algunas calles, al menos de momento, para destinar más fondos a este proyecto, lo hará, porque el Ayuntamiento lo considera una prioridad.
Precisamente, la cercanía de una boca de riego a la casa que la pasada madrugada ardió en Santa Cruz del Sil fue, tal cual relataron los vecinos, uno de los hechos que permitió a los bomberos actuar con celeridad y evitar que las llamas se propagaran al monte a la vivienda colindante. Un hecho reciente que justifica la necesidad de actuar en este sentido, sobre todo de cara al invierno, que es cuando se producen más riesgos de incendios con origen en las chimeneas o las cocinas de carbón de los pueblos.
