Diario de León

nuevas exhumaciones de la represión franquista

La ARMH inicia la búsqueda de tres fosas con 16 paseados en ‘la Curva de la Muerte’

La campaña para recuperar los cuerpos de siete fusilados en La Retuerta se extiende a dos grupos más de nueve desaparecidos en el entorno del paraje del Puerto de Manzanal Reanudará el rastreo cuando disponga de la paleadora.

La máquina de la Mancomunidad (arriba) ha trabajado frente a la pared de roca (derecha) del kilómetro 352. ARMH

La máquina de la Mancomunidad (arriba) ha trabajado frente a la pared de roca (derecha) del kilómetro 352. ARMH

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

CARLOS FIDALGO | PONFERRADA

En la curva del regato de La Retuerta, quizá la más peligrosa de todo el trazado de la antigua carretera N-VI que repta por el Puerto de Manzanal desde el Bierzo, hay una pared de roca con los restos de un anuncio. Ulloa Óptico Madrid, todavía se puede leer en letras borrosas. Pero la roca, y las señales son visibles, está salpicada por una sucesión de impactos de bala. Allí mataron, según las investigaciones de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) a siete bercianos que el 4 de agosto de 1936, después de su arresto en los primeros días de la sublevación militar, eran conducidos a León. Eran siete hombres jóvenes con nombres y apellidos —el más famoso de todos el futbolista de la Deportiva Ponferradina Pepín Gallego— que fueron obligados a bajar del vehículo que los trasladaba para morir en la cuneta. Ochenta y un años después de su asesinato, la ARMH ha iniciado la búsqueda de sus cuerpos en una campaña de exhumación que también se va a extender a otras dos fosas también pendientes de localización y situadas, según los testimonios recogidos por la asociación, en un radio de poco más de dos kilómetros de La Retuerta y donde los voluntarios esperan hallar los restos de otras seis personas en el paraje de Campo de las Monas y de otras tres en el de Los Campos, no lejos de Brañuelas.

La búsqueda iniciada días atrás durante tres jornadas, se reanudará en cuanto la Mancomunidad de Municipios de La Cepeda pueda ceder de nuevo una máquina paleadora con la que continuar las catas.

En La Retuerta, localizada en el kilómetro 352 de la vieja Madrid-Coruña, mataron junto a José Gallego Redondo, de 23 años de edad, jugador de la Deportiva y tornero de la MSP, a Jerónimo Álvarez Pacios, de 28 años, secretario judicial del Ayuntamiento de Borrenes, al ferroviario de Ponferrada Ramón Fernández Pérez, de 25 años, al chófer de Lago de Carucedo Eliseo Cobo Gómez, de 32 años, al electricista de la MSP José Monje Hernández, de 25 años, a Florencio González Cañueto, que portaba una cartilla militar a su nombre, y a Ramiro Llaguno Gutiérrez.

Desde el coche de línea que unía Ponferrada con León los vieron tirados en el apartadero de la carretera, en el mismo lugar donde la ARMH ha encontrado ahora, con la ayuda de un detector de metales, un viejo casquillo de fusil Carcano. «Al menos uno intentó escapar, fue fusilado y después lo tiraron por el terraplén al regato, según nos han contado», explicaba ayer el vicepresidente de la ARMH, Marco González. Los vecinos de la zona tuvieron después que enterrarles.

No lejos de allí, en el paraje de Los Campos, la ARMH también quiere localizar la fosa donde yacen otros tres jornaleros del municipio de Igüeña; Magín Abad Mayorga, de 28 años y vecino de Espina de Tremor, y los vecinos de Almagarinos Antonio Álvarez Fraga, de 36 años, y Francisco Carbajo Campazas, que era natural de Rodrigatos de la Obispalía y fue asesinado igualmente aunque ya había cumplido los 80 años. La fosa estuvo señalada durante años por un alambre de espino colocado por un familiar de Carbajo, pero la apertura de una pista y la plantación de una finca de pinos desdibujó su rastro y la ARMH todavía no ha dado con ella. Los tres, según los testimonios y recogidos por la asociación y las actas de defunción que figuran en el Registro Civil de Villagatón, murieron asesinados el 22 de septiembre de 1936. Las actas de los dos últimos recogen que su muerte ocurrió «a las diez y siete minutos». El epígrafe ‘a consecuencia de’ permanece vacío y el que señala el lugar de sepultura de los cuerpos tiene tachada la palabra cementerio y su lugar figura el «sitio» de «los campos, termino Brañuelas».

En la tercera fosa que la ARMH quiere localizar este mes de julio, ubicada en el vecino paraje de Los Campos de las Monas, la asociación sitúa los cuerpos de otras seis personas, pero sólo conoce la identidad de una, el minero de Tremor de Arriba (Igüeña) Constantino García Aguado, asesinado el 1 de noviembre de 1937. La ARMH ha encontrado actas de defunción en el Ayuntamiento de Villagatón de otros cinco hombres sin identificar.

Son actas similares a la de quién se cree que pudo ser Florencio González Cañueto, porque el «hombre sin identificar de unos 35 años» con «dentadura regular», «pelo negro» que vestía «camiseta usada, obscura (sic) y rayada», «pantalón de dril claro» y «chaqueta negra» llevaba una cartilla militar con ese nombre, según el mismo Registro Civil. El fallecido, refleja el documento, «fue hallado cadáver en el sitio llamado La Retuerta, término de La Silva (...) en el kilómetro 352 de la carretera general de Madrid a Coruña». Un kilómetro maldito. Un giro cerrado con mucha pendiente y mala visibilidad. Un lugar que en los pueblos del Mazanal conocieron durante mucho tiempo como ‘la Curva de la Muerte’ y no sólo por la cantidad de accidentes de tráfico que allí ocurrieron.

tracking