Diario de León
Luis del Olmo.

Luis del Olmo.

Publicado por
LUIS DEL OLMO
León

Creado:

Actualizado:

Los bercianos somos gente de mucha energía, en el sentido literal y en el metafórico. En sentido metafórico, porque cuando un berciano se empeña, es capaz de comerse el mundo como si fuese un botillo, y en el sentido literal porque la riqueza de nuestras minas nos dio carbón para alimentar poderosas centrales térmicas. Nos sobraba energía y la ofrecíamos al resto de España.

Pero eso, desgraciadamente, es historia. Ahora nos quieren dejar sin energía, nos están apagando. El carbón es malo, eso es lo que dicen. Y nosotros, los bercianos, que hemos vivido, sufrido y trabajado el carbón, pues también tenemos que ser malos, porque no nos hacen caso. Nos quitan la energía del carbón y las centrales térmicas, y miran para otro lado. Hablan de ecología, como si nosotros no cuidáramos la naturaleza más que nadie. Lo cierto es que además nos quieren arrebatar la energía mental, el impulso de superación que tenemos los bercianos. Y eso no lo podemos consentir. Ni hablar. Hay que decir basta, y decirlo de una forma tan potente que nos oigan desde Algeciras a Bruselas.

O sea, que cierran minas, cierran centrales, nos dejan sin energía ¿y qué nos ofrecen a cambio? Palabras, muchas palabras. Promesas, numerosas promesas. Tenemos excedentes de palabras, somos millonarios en promesas.

Cuando aparece un político, sobre todo en tiempo de elecciones, se le va la fuerza por la boca y promete el oro y el moro. Luego, al cruzar el Manzanal, le entra la amnesia del estadista. ¿Cómo? ¿De qué promesa hablan? Como solía decir nuestro querido Juan Morano, berciano consorte, «Prometer hasta meter, y una vez metido, se acabó lo prometido».

En cierta ocasión, ante millones de oyentes de Protagonistas, el presidente Zapatero me prometió que dentro de un año íbamos a inaugurar juntos la estación de AVE en Ponferrada. Y yo me lo creí. Luego comprendí que era la típica promesa del político que se hace expresamente para no cumplirla. Y Zapatero es leonés. Da igual. A la hora de la verdad, la clase política se olvida de sus raíces y sólo atiende a su propia conveniencia.

Se ha establecido la Mesa de Energía que es lo mismo que decir la Mesa sobre el futuro del Bierzo, y queremos que esta vez se sienten las administraciones, las dos, la central y la autonómica y no se levanten hasta que no encuentren soluciones claras, factibles y sinceras, sobre todo sinceras. Tengo la sospecha de que el presidente de Castilla y León cree que el Bierzo pertenece a Galicia, porque no se deja ver por aquí ni en pintura, porque así se ahorran más de un reproche.

¿Y qué me dicen de Endesa y compañía? Cierran las centrales térmicas, les costará un dinero hacerlo, pero afirman que eso ya lo tenían provisionado o sea que ya estaba previsto que iban a echar el cierre. Se irán de rositas, y si te he visto, no me acuerdo. No podemos consentir que nos abandonen y nos quedemos sin nuestra principal industria, así que hay que hacer con urgencia una reindustrialización del Bierzo, en serio. No con palabras, ni con promesas, con hechos.

Cuando comenzó la crisis del carbón, ya se hicieron planes, algunos muy bonitos sobre el papel. El gobierno central se comprometió a invertir unos dineros. También se le fue la fuerza por la boca. Porque no lo ha cumplido. Del primer plan que se hizo, se ha invertido solamente el 20 por ciento y del segundo plan, nada de nada, ni un euro. Nos deben mucho dinero, mucho. Ya es hora de que aflojen la pasta porque el Bierzo no se resigna a estar marginado.

Aquí hemos trabajado duro para conseguir muchas cosas. Se ha mejorado la agricultura, se han creado nuevas denominaciones de origen para nuestros productos del campo, hemos elevado el prestigio y la calidad de nuestros vinos, que ahora se sitúan entre los mejores del mundo, hemos impulsado el turismo, hemos potenciado los dos caminos de Santiago, el de verano y el de invierno, hemos traído la universidad, para que nuestros jóvenes no tengan que marchar de casa, hemos conseguido que las Médulas fueran Patrimonio de la Humanidad.

Se han hecho muchas cosas, y durante un tiempo parecía que se invertiría el giro migratorio. La gente no se iba del Bierzo, venía al Bierzo. Pero ahora ha llegado el tremendo frenazo, y van a desmantelar una de nuestras principales potencias industriales. Si nos dejan sin energía, nos dejan sin futuro. Quereos que nos paguen el dinero que nos deben, exigimos que potencien energías alternativas, que haberlas, haylas, necesitamos que se preocupen de nosotros, porque nos merecemos una justa compensación por todo lo mucho que hemos hecho por el país.

El Bierzo siempre fue una región con espíritu de lucha, combatiente y rebelde, como sus antepasados, los templarios. Nos quitaron el privilegio de ser provincia, precisamente a causa de nuestra rebeldía. Pero ahora hay que demostrar que somos una región a tener en cuenta. Vamos a dejar claro a los dirigentes autonómicos y centrales, que el Bierzo, esta vez, está más unido que nunca. En esta batalla donde nos jugamos el futuro, no caben los partidos. Aquí no hay partidos, aquí estamos enteros. El Bierzo entero, los de derechas, los de izquierdas, los de centro, los de arriba y los de abajo, el Bierzo entero como un solo hombre, miles de voces que suenen bien fuerte, para exigir que salden definitivamente la deuda que tienen contraída con nosotros y nos tengan en cuenta.

En el Bierzo ahora solamente suena la misma voz, pronunciada por miles de gargantas. No queremos promesas, queremos realidades, y seguiremos así, protestando una y otra vez, exigiendo sin cesar, insistiendo lo que haga falta, porque nos jugamos el futuro. Hay que conseguir frenar la destrucción de empleo, no queremos que nuestros hijos tengan que salir de su tierra, porque no encuentren en ella oportunidades. La última noticia, como informaba este diario, «la autopista Oviedo – La Espina seguirá hacia Galicia por la costa y no por el Bierzo». Hay que seguir, hay que luchar, y sobre todo hay que estar unidos, por encima de los colores políticos.

Gracias paisanos. Nos vemos hoy en la manifestación.

tracking