Ponferrada certifica el fin del préstamo de bicis y estudia el despliegue eléctrico

m. carro | ponferradaace meses que el abandono del servicio de préstamo de bicicletas de Ponferrada es visible y el concejal de Movilidad, Ricardo Miranda, certificó ayer la desaparición definitiva del mismo. La quiebra de la empresa concesionaria, La Bici, ha dejado el servicio en muy mal estado, inexistente. Situación que se suma a los incumplimientos contractuales anteriores, como el hecho de no haber instalado el número de puntos de préstamo previstos en el pliego de condiciones o la cuestionada atención y conservación. Dado que se han acumulado varias faltas «graves» y que la empresa «ha desaparecido» —explicó Miranda— y dejado de prestar el servicio cinco años antes de lo contratado, el Ayuntamiento ha determinado retener la fianza de 20.000 euros en concepto de penalización. Eso sí, de momento, Ponferrada se queda sin servicio público de bicicletas.

En todo caso, la carencia de un servicio de estas características poco o nada va a afectar a la vida diaria de los ponferradinos, teniendo en cuenta que el uso de estas bicicletas era testimonial, «ridículo», según el concejal. Por esto, el Ayuntamiento aprovechará la situación actual para estudiar otras alternativas, enfocadas principalmente a la modernización del servicio y a la inclusión de bicicletas eléctricas para tratar de multiplicar el uso y ganar rentabilidad. Cómo se hará es lo que está todavía por determinar. «Una vez que tengamos claro qué tipo de servicio se puede ofrecer con bicicletas eléctricas, pues habría o una concesión o compra. Eso habría que mirarlo», apuntó Ricardo Miranda.

De momento, el primer paso de la administración local en relación a este servicio pasa por iniciar el expediente de rescisión de un contrato firmado para diez años pero que se ha roto a los cinco. Además, la empresa se ha llevado todas las bicicletas, ya que el pliego establecía que pasarían a ser de titularidad municipal a los diez años, es decir, una vez cumplido el contrato. Mientras se trabaja en el expediente de rescisión y dado que Ponferrada está dentro de la red de ‘ciudades amigas de la bicicleta’, se está apoyando en la experiencia de urbes como Oviedo, Vitoria y Madrid para tratar de adaptar el nuevo modelo.

«En estas ciudades, ya se ha cambiado el sistema y eso es lo que queremos hacer nosotros, porque tenerlo como lo tenía Ponferrada no es rentable. Hay que conseguir que la gente lo utilice», dijo el concejal de Movilidad, apuntando que, en 2017, el préstamos de bicicletas registró, únicamente, media docena de usos.

IU pide cuentas

Ayer mismo, Izquierda Unida (IU) presentó una batería de preguntas en el Ayuntamiento para conocer la situación real del servicio de préstamo de bicicletas, ante los incumplimientos evidentes por parte de la concesionaria. Quiere saber dónde están las bicis y por qué no se ha rescatado el servicio con anterioridad.