Polémica
El niño acosado en El Bierzo cambia de centro: ¿se aísla a las víctimas?
La madre que impidió el suicidio de su hijo agradece la ayuda pero ve «injusto» su traslado
Imagen alegórica de una obra teatral en la que se aborda el acoso y el maltrato, escenificado por el grupo Kote Marjanishvili. ZURAB
El caso relatado ayer por este periódico, de una madre que vive en Cacabelos e impidió de madrugada que su hijo de 13 años se suicidara saltando por la ventana tras sentirse acosado en el instituto, lleva camino de volver a la normalidad. «El niño está fastidiado, pero se encuentra más contento. Ha visitado ya el nuevo instituto al que va a ir ahora, al que trasladan en otra localidad. Ya le han enseñado su nuevo instituto, las aulas y demás, y se siente más arropado», explicaba la madre en la pasada jornada sobre el estado actual del menor.
Campaña nacional
El asunto, que está siendo llevado por la Justicia tras una denuncia por acoso escolar en el Juzgado 7 de Ponferrada, ha avanzado en el sentido de poner distancia entre el adolescente de primero de la ESO acosado y las personas señaladas ante la comunidad escolar como causantes del bullying . Los presuntos acosadores quedarán en el centro de Cacabelos y también se realizará un seguimiento para tratar de evitar este tipo de incidentes, que pueden terminar en tragedia.
El menor que ha tenido que dejar de estudiar en la villa del Cúa fue matriculado este pasado viernes en su nuevo destino, en otro instituto de la comarca del Bierzo. «El niño sale de ese círculo en el que se encontraba mal, pero tengo que decir que, en el fondo, es injusto que sea mi hijo el que tenga que moverse e irse de su instituto. Es muy injusto, repito. Esta solución de traslado, que es necesaria ante lo sucedido, parece como si al final mi hijo fuera un delincuente, la persona que hizo mal, y por eso es el que encima tiene que poner tierra de por medio e irse. Es evidente que el es el agredido», lamenta su madre.
Dolencias agravadas
La denuncia que interpuso en los juzgados de Ponferrada no prosperará en toda su extensión, en el sentido de que los denunciados son menores de edad, y entonces entra en el caso la Fiscalía de Menores.
«No deberían callarse»
Con todo lo que ha vivido en este caso, con todas las dificultades a las que se ha enfrentado, la madre del muchacho que evitó en la madrugada del pasado miércoles que saltase al vacío desde la ventana de su apartamento, decía ayer que sería necesario cambiar la Ley del Menor. «Creo que deberían modificar esa ley, conozco más casos de bullying y acoso escolar, de padres que están padeciendo lo indecible y sin embargo están callados. No deberían callarse y esto debe conocerse, somos muchos padres afectados», manifiesta.
Los cambios en esa ley estarían dirigidos a darle una mayor protección a la persona acosada y actuar con el acosador de manera ejemplarizante.