Diario de León

La hija de un minero que nunca soñó con ser actriz

Aitana Quintans es una joven lacianiega a la que el destino ha querido dar un papel protagonista en la película ‘Camino Negro’, que cuenta la historia de la lucha de los mineros del Sil y se rodará en el Bierzo en noviembre

Aitana Quintans a la entrada de un pozo en Caboalles. DL

Aitana Quintans a la entrada de un pozo en Caboalles. DL

Ponferrada

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Aitana Quintans es Aitana y es Camino. En ambos casos, la descendiente de una estirpe de mineros de fuerte carácter y creencias bien definidas. Aitana es la real y Camino el personaje que interpretará en la película ‘Camino Negro’, que cuenta la historia de la lucha minera en la Cuenca del Sil y empezará a rodarse a mediados de noviembre en el Bierzo, bajo el ala del director Luisje Moyano, que quedó prendado de esta joven lacianiega, de Caboalles de Arriba, nada más escucharla hablar.

Aitana es una de las más de 200 personas que se han presentando a los castings que el equipo de Moyano ha realizado en Páramo del Sil, Villablino, Toreno y Matarrosa para seleccionar a los figurantes de la película. Pero ella no es una más. Ella ocupará uno de los papeles principales; interpretará a Camino, una de las tres amigas protagonistas del film, en su etapa joven. De la versión actual del personaje se encargará Miriam Díaz Aroca y, junto a ella, Arancha del Sol y Roko, que serán Bárbara y Ofelia.

A sus 18 años, Aitana estudia segundo de Bachillerato en el instituto Obispo Argüelles de Villablino y por su cabeza nunca pasó la idea de ser actriz; ella va a estudiar Psicología. Fue el empuje de dos amigos que sí están inmersos en las artes escénicas lo que la animó a presentarse al casting para ‘Camino Negro’, sin más pretensiones que descubrir algo nuevo y disfrutar de la experiencia. Pero ni si quiera tuvo que pasar la prueba, aunque la hizo como el resto. Moyano decidió que ella sería la joven Camino nada más verla llegar y tras ver cómo se expresaba.

Los dos coincidieron en la plaza de la Casa de la Cultura de Villablino minutos antes del inicio del casting. Él estaba sentado en una grada con el libro en el que está basada la película en la mano y ella llegó y se sentó a su lado. Conversaron un rato sin que la aspirante supiera con quien hablaba y ahí fue donde el director la eligió. No tenía dudas. «Llegó muy bien vestida y me llamó enormemente la atención. Después, me gustó como se expresaba, inmediatamente vi que encajaba perfectamente en el personaje», explica Juisje Moyano.

«Me senté a su lado y, sin más, hablé con él y con otras personas que estaban allí. Yo desconocía quién era. De hecho, pensaba que sería alguien que, como yo, iba a hacer el casting. No sé que le llamó la atención de mí, pero después de hacer la prueba me pidieron que me quedara hasta el final, que el director quería hablar conmigo. Y me preguntó si estaría interesada en hacer uno de los papeles protagonistas. Desde luego, acepté», explica la joven.

Los abuelos, el tío y el padre de Aitana fueron mineros. Lo suyo con el carbón es una cuestión de sangre y eso se siente también en el personaje, con el que mantiene cierta simetría emocional y varios rastros de personalidad. Reconoce que se siente identificada con esa Camino de 18 años de Matarrosa el Sil que luchó con fuerza por sus ideales y por defender la minería allá por los años 70.

«Camino pega mucho con mi personalidad. Es algo rebelde, pero también tiene paz, serenidad y unos fuertes valores. Esa fuerza y esa lucha por defender en lo que cree por encima de todo tienen mucho que ver conmigo», reconoce Aitana, que hace días que conversa con su personaje en cada uno de los ensayos, preparándose para la grabación de las escenas que, en su caso, será entre el 20 y el 30 de noviembre. Lo único que avanza de la joven Camino es que «ya empieza fuerte en la película, directamente rebelándose».

‘Camino Negro’ es la historia de una cuenca minera que se aferró a la defensa de su modo de vida a finales de los 60 y los años 70, con movilizaciones y huelgas que volverán al presente en una película que está basada en el libro del mismo título en el que la autora, María Luisa Picado, cuenta su historia personal, lo que vivió siendo una niña y que ahora queda lejos de las nuevas generaciones. Acercar ese pasado es una de las razones de ser de la producción. La propia Aitana reconoce que, siendo hija de minero y habiéndose criado en una cuenca, no entiende igual aquel contexto que marcó la lucha que ahora encarnará siendo una joven que se parece mucho a ella.

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