El alcalde de Toral de los Vados dice adiós tras más de 25 años al frente del municipio
Pedro Fernández se jubila y su puesto lo ocupará el actual segundo teniente de alcalde. "No me voy porque me echen, como algunos han querido", ha dicho en una carta dirigida a sus vecinos y en clara alusión a su ya expartido, el PSOE
Veinticinco años y siete meses después de acceder a la Alcaldía de Toral de los Vados por primera vez, en 1999, Pedro Fernández se despide. El que ha sido regidor de este municipio berciano siempre con mayoría absoluta dice adiós porque se jubila. Asegura que es una decisión que tenía tomada desde el principio de la legislatura, un acuerdo preelectoral que había alcanzado con su grupo. "Acordamos que estaría, más o menos, hasta mitad de legislatura y, después, lo dejaría", explica. Se va pero no del todo, ya que se mantendrá como concejal del equipo de gobierno. La renuncia se formalizará en pleno el día 3 de diciembre y 48 horas después se celebrará una sesión extraordinaria en la que será nombrado el nuevo alcalde. El elegido es el actual segundo teniente de alcalde, Alberto Quiroga.
"Mi idea era retirarme en diciembre y así lo haré. Ya son muchos años y creo que el descanso es merecido. Quiero tomarme la jubilación con más calma y menos presiones que las que exige un cargo como el que ocupo", reata Fernández, que ha querido despedirse de sus vecinos haciendo pública una carta en la que aprovecha para dejar claro que no se va porque lo eche, sino porque así lo ha decidido. Un claro mensaje al PSOE que fue su partido hasta las últimas elecciones municipales. Apartado de las filas sociales, Pedro Fernández creo una candidatura independiente, Toral y Sus Pueblos, con la que volvió a arrasar con mayoría.
"Con vuestro apoyo me habéis permitido permanecer en la Alcaldía hasta el momento en que me vaya; no porque me echen, como algunos han pretendido, sino porque cercana mi jubilación quiero dar paso a la fuerza de la juventud", escribe el todavía alcalde en la carta que ha dirigido a sus paisanos.
Es uno de los alcaldes más longevos del Bierzo en lo que a posesión del bastón de mando se refiere y dice sentirse "muy orgulloso del respaldo tan importante que he tenido todos los años, sobre todo en esta última legislatura". "Ha sido un trabajo apasionante", afirma también, reconociendo "entrega y compromiso" por su parte. "No me voy, doy un paso lateral y seguiré como concejal apoyando a mi grupo en todo lo que sea necesario", incide.