El alcalde denuncia al portavoz del PSOE por injurias y calumnias

Un Raúl Valcarce serio, con aplomo y sosegado, compareció ayer en la sede del PP de Ponferrada para explicar a los periodistas que lo dicho en los últimos días por Óscar Garnelo no son más que falacias y mentiras encaminadas a hacerle daño en lo personal y en lo político. Valcarce acusó a Garnelo de «cobarde» por decirle a una concejal suya «que estaba cansado de mosquitas muertas» como ella, y de «mentiroso», por que cuando desde el PSOE le acusan de tener un testaferro, en el PP adjudican las obras en base al reglamento de bienes inmuebles. Así, la adjudicación del recinto ferial y las piscinas «reunieron todos los requisitos legales, no tuvieron ni un reparo de intervención y ni un expediente con elegaciones. En el caso de las piscinas, incluso el PSOE voto «sí» y en el recinto ferial sólo hubo una abstención socialista. Valcarce cuenta que le acusan de tráfico de influencias con la creación de la zona industrial de La Pradela y explica que el PSOE quiere en este caso paralizar las expropiaciones porque hay terrenos de «amigos y familiares directos de Óscar Garnelo». En cuanto al centro de día, Valcarce asegura que al PSOE le molesta que el PP consiga «el 200%» de lo que iba en su programa electoral. También indica el alcalde que le acusaron de cobrar 36 millones de pesetas y aportó documentos de cobros anuales de 400.000 a 600.000 pesetas.