El PSOE invita a su ex secretario, ya expulsado, a la Conferencia Política
Pedro Fernández fue el último secretario del PSOE ponferradino
La Comisión Ejecutiva Federal del PSOE no tiene actualizados sus archivos informáticos en lo referente a su militancia ni tampoco en lo que atañe a los cargos órganicos del partido. De otra forma no parece tener explicación la carta que ha recibido recientemente el que fuera máximo responsable de los socialistas en Ponferrada, Pedro Fernández, para que asista durante este fin de semana a la Conferencia Política que se celebra en Madrid. Pedro Fernández Robles fue expulsado como secretario local del PSOE y también como militante por la propia dirección federal, a instancias de la ejecutiva provincial y de la gestora que en Ponferrada comandan actualmente, entre otros concejales, Pedro Nieto o Charo Velasco, quienes entendían que el secretario había perjudicado al partido con reiteradas manifestaciones discrepantes con las suyas. Al hilo de esta medida disciplinaria, Pedro Fernández acudió a los tribunales ordinarios, que a finales del año pasado le dieron la razón y condenaron al PSOE a readmitir como militante al ex jefe de los socialistas en Ponferrada, y además impusieron a los socialistas un euro de indemnización simbólica por haber vulnerado sus derechos fundamentales. Por esta razón, el propio Pedro Fernández expresó ayer a este periódico su excepcional sorpresa ante la recepción de la carta, que firma el secretario de Organización y Acción Electoral, José Blanco, en la que se le invita, textualmente, a «participar como observador en los trabajos de nuestra conferencia, y a compartir con nosotros el debate y la reflexión sobre las alternativas que el Gobierno del cambio pondrá en marcha a partir del próximo mes de marzo». «Se ve», ironizó el ex secretario ponferradino, «que de verdad algo está cambiando en el partido, y que se han dado cuenta de lo que tengo que aportar. He estado a punto de inscribirme». Aunque ya en un tono más circunspecto, Fernández explicó que toda la confusión debe tener el origen en la falta de renovación de los ficheros informáticos de la organización a nivel federal.