Los mil doscientos mineros del Bierzo Alto y Fabero Sil no acudieron a sus puestos de trabajo
Las dos cuencas bercianas paran en protesta por el accidente mortal en Torre
El comité quiere saber por qué la mina no interrumpió su actividad en el momento del suceso
Exterior del yacimiento de Antracitas de Arlanza, el día del accidente mortal
Las cuencas mineras del Bierzo Alto y de Fabero-Sil pararon ayer en señal de protesta por el accidente mortal que el pasado viernes costó la vida al mecánico de Antracitas de Brañuelas (Torre del Bierzo) Manuel Ucha. A los aproximadamente seiscientos productores que trabajan en las diez explotaciones del Bierzo Alto -las que pertenecen a Unión Minera del Norte (Uminsa), empresa del fallecido, y el grupo Viloria y el resto de la cuenca- se sumaron otros seiscientos en la cuenca Fabero-Sil y también en nómina de la sociedad minera del grupo de Victorino Alonso, según confirmó el sindicato CC.OO. «No es tanto un paro en señal de duelo, como en señal de protesta», recalcó el responsable de la sección minera del sindicato en el Bierzo Alto, Manuel Ángel Rey. La primera víctima mortal de la minería berciana en lo que va de año, y la segunda en la provincia tras el fallecimiento de otro productor de Uminsa en Laciana, ha hecho que los dos sindicatos mayoritarios den la voz de alarma en torno a las condiciones de seguridad en las minas. Y la tardanza en comunicar el suceso al resto de la plantilla de Antracitas de Brañuelas, que no interrumpió su actividad hasta tres horas después, han agravado el malestar. «Queremos reunirnos con la empresa para que nos dé explicaciones, aunque creemos que no hubo mala fe, porque fue una falta de respeto», espetó Rey.