Al llegar el sábado, vuelta al cole

El plan de centros abiertos puesto en marcha por el Ayuntamiento de Ponferrada cerró con éxito su segunda jornada, la del puente del Pilar. Si bien la pasada semana las monitoras encargadas de atender a los pequeños comprobaron el alto interés de las familias ponferradinas por el proyecto, en la jornada del viernes, día de puente en las escuelas, vieron cómo la cifra de niños aumentaba, hasta superar los cuarenta pequeños de infantil y primaria, con edades de hasta diez años. Y es que este tipo de iniciativas, según afirmó una de las dos monitoras que atienden a los niños en el colegio Valentín García Yebra, eran hasta ahora una carencia municipal, vista la alta demanda por parte de las familias, que urgían medidas que les faciliten la conciliación de la vida familiar con el horario de trabajo. En este sentido, la monitora, Noemí Prieto, afirmó que una de las cuestiones que más repiten los padres es la necesidad de que el programa se amplíe a todos los meses del año, haciendo especial hincapié en el mes de agosto, cuando los centros permanecen cerrados y muchas familias no encuentran forma de llevar a cabo esa conciliación. La mañana entre juegos Ajenos a esta dificultad que sufren sus padres, los pequeños pasaron el viernes y el sábado del puente disfrutando con niños y niñas de su edad de los juegos y las actividades educativas preparadas por profesionales. Una vez más, el colegio Campo de la Cruz no reunió la cifra suficiente de niños, por lo que se tomó la misma decisión que en la primera jornada, la de agruparlos a todos en el García Yebra.