¿Vecinos apolíticos?

Nadie dice toda la verdad. Nadie miente del todo. El mundo de las asociaciones de vecinos resulta un mundo complicado de conocer a fondo. Cada barrio defiende lo suyo, cada representante vecinal se suma a la dirección de su respectiva asociación con la mezcla de servicio público, una dosis de ambición personal, defensa de intereses de la zona, individuales y hasta escuela de futuros políticos locales. Eso y todo son las asociaciones de vecinos. En la comarca del Bierzo existe un Registro de Asociaciones en la Junta de Castilla y León, donde el movimiento vecinal se mezcla en listados de asociaciones culturales y de otros tipos. En el Consejo Comarcal existe un primitivo listado de asociaciones derivado de la Junta que, ahora sí con competencia, tendrá que ser modernizado y actualizado debidamente. Y finalmente, en los ayuntamientos, existe un registro de asociaciones que, en el caso de Ponferrada, hasta llega a ser uno sólo para las de los barrios y pueblos que conforman el extenso municipio. Con todo ello, se puede afirmar que en el Bierzo hay poco más de 50 asociaciones de vecinos que, según el expresidente de la Federación Comarcal, Emilio Zapico, «representan a un colectivo aproximado de 3.000 asociados». Esto es, tocan prorrateando, a 60 vecinos por asociación. La Federación de Asociaciones de Vecinos del Bierzo reúne a 15 colectivos, de los que 10 son de Ponferrada y 5 del resto de la comarca. Pero no todas las asociaciones pertenecen a esta Federación, puesto que las más de 30 que se quedan fuera, 18 son de Ponferrada. Es decir, la capital del Bierzo cuentan con nada más y nada menos que 28 asociaciones vecinales. Las que sobrepasan de 100 socios son La Placa, Cuatrovientos, Compostilla, Flores, La Puebla, Judíos, Pajariel, Casco Antiguo, Puente Boeza, San Antonio, Patricia... En cuanto a sus cuotas, oscilan desde el simbólico euro anual de La Nogal, hasta los doce euros, uno al mes, de otras asociaciones. Generalmente, sus presupuestos son excasos y dependen totalmente de las subvenciones municipales y de realizar actividades culturales o festivas con ánimo de hacer algo de caja.