Una protesta vecinal en Zamora concluye con un puente sin accesos
Aspecto del puente que cruza la autovía en Morales de Toro sin acceso por ninguno de sus lados
Los conductores que circulan por el kilómetro 418 de la A-11, la Autovía del Duero, se habrán preguntado por un puente que cruza las dos calzadas por lo alto, aunque no tiene acceso por ninguno de los dos lados. Pese a su aparente inutilidad, para los habitantes de Morales de Toro (Zamora) el puente es «un arco del triunfo» de la movilización popular frente al ex ministro de Fomento Francisco Álvarez Cascos, además de una infraestructura clave para el futuro de la localidad, según el alcalde de Morales de Toro, Luis Segovia. El tramo de autovía que une Villaester (Valladolid) con Toro (Zamora) se abrió al tráfico el pasado 2 de marzo y la razón para que el paso superior permanezca solitario es que el acceso a Morales de Toro no estaba previsto en el proyecto inicial. Fue la movilización de los vecinos la que amargó al ex presidente del Gobierno José María Aznar la colocación de la primera piedra del tramo, el 29 de agosto de 2002. Sin embargo, también fue la protesta la que consiguió que en la colocación de otra primera piedra, la del tramo Toro-Zamora de la misma autovía el 20 de noviembre del 2002, el entonces ministro de Fomento de entonces, Francisco Álvarez Cascos, anunciara la construcción del acceso. Así, las obras del tramo de Villaester-Toro comenzaron en agosto y aunque el enlace de la autovía con Morales debía pasar aún todos los trámites al no estar en el proyecto inicial, se decidió construir el paso superior para evitar después cortar el tráfico para levantarlo.