Herrera pedirá al Gobierno que active el segundo Plan de Calidad del agua

El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, pedirá a la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, en la reunión que mantendrán el próximo lunes, la activación del II Plan de Calidad de las Aguas, con el fin de financiar diferentes obras de abastecimiento en la región. Ésta será la propuesta estrella que el jefe del Ejecutivo autonómico trasladará a Espinosa en materia medioambiental para que el Gobierno central destine fondos y que al final de legislatura «toda la población castellano y leonesa disponga de agua potable mediante estaciones depuradoras». Estas declaraciones fueron realizadas ayer durante al acto de inauguración de la ampliación de la depuradora de la localidad burgalesa de Briviesca. Durante el acto, Juan Vicente Herrera también aprovechó para adelantar que solicitará a la ministra del ramo que dicho plan sirva para financiar «a fondo perdido» parte de la ampliación de la estación depuradora de Burgos capital, y no con un préstamo como «se hace en la actualidad». Agua de calidad La inauguración de la estación de la depuradora, que ha supuesto una inversión de 2,4 millones de euros y que beneficiará a 42.000 habitantes, se enmarca en el compromiso de legislatura del Ejecutivo autonómico de garantizar la depuración de aguas residuales a prácticamente el cien por cien de la población. Herrera destacó durante el acto que facilitar la depuración de aguas y por lo tanto garantizar un agua de calidad en cualquier territorio «constituye un servicio público y un derecho básico de todos los ciudadanos, independientemente de la comunidad autónoma de la que se trate, algo que también debe ser tenido en cuenta en el actual debate sobre financiación autonómica». La nueva depuradora de aguas residuales se ha diseñado para el tratamiento de 7.000 metros cúbicos diarios. La obra se completa con instalaciones de electricidad y control que permiten supervisar el funcionamiento de la planta y controlar los equipos que están en modo automático. El municipio de Briviesca ya contaba con una estación depuradora de aguas residuales puesta en funcionamiento en el año 1996. Sin embargo, el aumento, tanto en población como industrias del municipio, se tradujo en un incremento de caudales y cargas contaminantes que sobrepasaron la capacidad de la depuradora y por ello se hizo necesaria la ampliación de la planta. El proyecto ha cuidado «especialmente» el impacto ambiental, por lo que los elementos que pueden generar olores se han incluido dentro de edificios o se han cubierto. Así, las fuentes generadoras de ruidos se han dispuesto en el interior de los edificios y la plantación de toda la parcela con césped y otras especies vegetales aromáticas, serán regados con agua depurada. Otras obras acometidas fueron la restitución del cerramiento, mejoras en la iluminación y la restitución de bordillos, con el fin de conseguir un aspecto más «armónico» entre la urbanización antigua y la de nueva ejecución inaugurada ayer.