Diario de León
Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Crítica de televisión yolanda veiga

Fue solo un momento, en el que nos temimos lo peor. ¿Se habría cansado Carlos de ser Carlitos? ¿Habría cortado, definitivamente, el grifo RTVE? Estábamos contagiados ya por la llantina, cuando salió el doctor con buenas noticias: «Evoluciona favorablemente, en cuatro o cinco días pasará a planta». La cosa acabó todavía mejor porque del hospital lo mandaron a casa. Cuéntame despidió el jueves su 14 temporada con el capítulo más intenso de los 253 que se han emitido.

El guión, dentro de lo previsible, mantuvo muy bien la tensión (también ayuda que no haya anuncios) y Ricardo Gómez (Carlitos), Juan Echanove (Miguel), Ana Duato (Merche) e Imanol Arias (Antonio) se reivindicaron como los actores enormes que son (la escena de Echanove al teléfono, tremenda).

Cuéntame se despidió con fuegos artificiales, con cinco millones de espectadores que justifican que una televisión pública se gaste cinco millones de euros cada año en la serie (les vamos a echar de menos hasta que vuelvan). Ésta ha sido la temporada de Carlos, como la anterior fue la de Merche y la otra la de Inés.

Superada una adolescencia de perfil más secundario, durante la cual las apreturas económicas de los Alcántara, el cáncer de Merche y el problema de drogas de Inés llenaron las tramas, la recién estrenada juventud de Carlos (que no Carlitos) ha devuelto al personaje el más que merecido protagonismo. Los guionistas acertaron al dibujarle con muchos matices. Porque es el hijo amoroso, pero también el chaval rebelde, el novio ideal y el amante no correspondido... Carlitos es muchas cosas y Ricardo las sabe hacer todas.

Desconocemos el peaje que tendrá que pagar por la sobreexposición que implica un papel protagonista en una serie de máxima audiencia que lleva doce años en pantalla, pero la tele es muy caprichosa. Juega en su favor que Ricardo nunca ha explotado eso del ‘niño artista’ en los medios, así que cuando acabe Cuéntame debería tener todas las puertas abiertas porque es un gran actor.

Se dio cuenta el fallecido Tony Leblanc en la primera escena que compartió con él. Carlitos no levantaba un metro del suelo y llenaba solo la pantalla.

tracking