Diario de León

MINORÍAS ABSOLUTAS

Querido Lennon

Publicado por
rafael saravia
León

Creado:

Actualizado:

Amigo Lennon, esta afinidad nuestra a las amistades quebradizas me hace recordarte en estos días —se cumplieron la semana pasada 36 eternos años de tu asesinato— con esa confusa canción tuya… ¿Cómo era? Decía algo así: «So Sgt. Pepper took you by surprise/ You better see right through that mother’s eyes/ Those freaks was right when they said you was dead/ The one mistake you made was in your head/ Ah, how do you sleep?/ Ah, how do you sleep at night?».

Sin duda entiendo tus motivos, quisiera decir que ando en tu misma situación, pero sonaría de un pedante que otros aprovecharían para el chance, y hasta yo me reiría con ellos por la distancia divina que nos separa. La verdad es que estos días tu conciencia y disidencia se me han aparecido con una fuerza descomunal, tú creaste el mito en los sesenta y tú lo mataste en los setenta. Ahí es nada, toda una década de gloria y, aun así, de sinsabores personales y mucho vacío por llenar. ¡Cuánto he de aprender amado John, cuánto he de aprender!

Querido Lennon, hoy sin duda me quedaría con tu espiritualidad contrastada, con tu fe en el hombre que aboga por el cambio de paradigmas, con ese aliento conciliador que te otorgó no el LSD, sino el amor y la reflexión madura del tiempo pasante. Pero si he de quedarme con algo, en estos días convulsos y con pelos anarquizados, es con tu imagen de hombre valiente asumiendo el fin de tantos espacios a probar.

La fama no te hizo volar al lugar deseado, fuiste intrépido al no quererla a costa de lo que fuese, tuviste el ego bien alimentado, pero… ¡supiste apartarte tantas veces del camino marcado! admirado John, cómo te entiendo cuando escribiste, junto a Bowie, esa esclarecedora canción que dice: «Fame Fame, makes a man take things over  / Fame, lets him loose, hard to swallow  / Fame, puts you there where things are hollow  / Fame  / Fame, it’s not your brain, it’s just the flame  / That burns your change to keep you insane  / Fame».

Has sido para mí, querido Lennon, un ejemplo en el arte de cerrar espacios de confort banal. No te digo que lo haya conseguido, para nada, pero tu camino sí que es espejo en esta catarsis mía de no tener miedo a cerrar etapas, a cruzar los caminos de lo fácil para caer en el miedo atroz del piso resbaladizo, inseguro… en ese lugar sin acomodo al que aún no he llegado. Sin duda te entiendo ahora cuando vaticinabas que no estábamos en este mundo para vivir con dolor y miedo, que el karma iba a tomarnos sí o sí. Cuando nos decías: «What in the world you thinking of/ Laughing in the face of love/ What on earth you tryin’ to do/ It’s up to you, yeah you».

Vivir con convicciones era lo importante querido Lennon. Imaginar un mundo mejor, saberlo atrozmente mejorable. Por eso, en estos días, cuando se acaban de cumplir apenas 36 años de tu muerte, te escribo con el poderoso deseo de ser un soñador, o como tú decías… «Imagine there’s no heaven,/ It’s easy if you try,/ No hell below us,/ Above us only sky,/ Imagine all the people/ living for today...».

tracking