Caballé: «Hacer el Camino de Santiago es ir hacia tu luz»

Montserrat Caballé, que hoy inaugurará la cuarta edición del Festival Internacional de Música de Galicia, considera que «hacer el Camino de Santiago es como caminar hacia tu luz». La soprano, que ha hecho el Camino en tres ocasiones, explicó en conferencia de prensa que las sensaciones que produce este viaje hay que sentirlas, porque es muy difícil de explicar. Para Montserrat Caballé, «la gente que no lo siente me da cierta pena, porque no conocen esa sensación de Gloria, que es muy difícil de sentir en la Tierra, pero a veces sucede y a mí me ha sucedido». Se mostró también muy emocionada por cantar en la plaza del Obradoiro, que calificó de «lugar especial», porque cuando estas en lugares especiales -dijo- «se te pone la carne de gallina, una sensación muy grande y tienes que vencerla, porque tu emoción no debe poder más que lo que tienes que hacer y, sin duda, hay muy pocos lugares que emocionan de esta manera». Agregó que otro es Palestina y reconoció que la primera vez que llegó allí, todavía en el avión («en Iberia, esos que pierden las maletas constantemente», ironizó), se puso a llorar. «Para mí era llegar a la tierra prometida, la tierra prometida para los judíos, la tierra de los palestinos, la tierra de nuestro señor Jesucristo, de la Virgen y de los Apóstoles. Era llegar a la tierra de todos y de todas las religiones juntas que podían convivir, por lo menos cuando yo llegué, como en tantos siglos lo habían hecho en paz». También se refirió, en su comparecencia ante los informadores, a las emociones que le produce la música. Así narró sus sensaciones cuando empieza a cantar: «Tienes que respirar muy hondo para que la primera frase sea engolada, para que la música te invada. Es como si la sangre que te fluye por las venas, la música te lleva a otro lugar y ya no ves nada. En realidad no ves nada. Flotas, esa es la palabra, flotar, estar como en un limbo y tener el placer de cantar, es una sensación muy extraña». La artista catalana se reconoció «muy creyente» y recordó la anécdota de una de las últimas veces en que conversó con el Dalai Lama, quien le expresó su admiración por su fe inquebrantable y le dijo -rió- «que era casi tan grande como la suya, tanto no, pero casi». Preguntada por la dureza de su trabajo, Montserrat Caballé opinó que un trabajo es duro cuando no gusta, pues, «cuando se trabaja en lo que gusta, normalmente no es sacrificio trabajar, porque ennoblece y da oportunidades. La dureza del trabajo depende del amor con que se tome y, en mi lugar y en el de mi familia, no ha sido duro». En cuanto a sus actuaciones con su hija, Montserrat Martin, explicó que se encuentra «muy ilusionada» y recordó que el próximo 13 de julio coincidirán en Roma con la ópera Cleopatra. «A mí me hace mucha ilusión que tenga su carrera y su propio camino, pero también me gusta de vez en cuando cantar juntas», aunque agregó que, para ello, «tendrían que contratarnos». La conferencia de prensa se inició a la misma hora que el partido de la final de la Copa del Mundo de fútbol, que ganó Brasil. La soprano dijo que, al concluir su comparecencia, vería la segunda parte del encuentro y mostró su deseo, después satisfecho, de que ganase Brasil, a pesar de cantar frecuentemente y haber vivido en Alemania. La actuación de Montserrat Caballé será la primera del Festival Internacional de Música de Galicia, que ofrecerá, desde hoy, 22 actuaciones en los primeros 19 días del mes, la mayoría en Santiago de Compostela.