Diario de León

Conrado del Campo y las fuentes

Publicado por
MIGUEL ÁNGEL NEPOMUCENO
León

Creado:

Actualizado:

PARECE ser que Conrado del Campo va a tener más difusión y predicamento varios años después de muerto que en vida a la luz del escrito publicado ayer en esta sección y firmado por el Dúo Ad Libitum. En él se dice que la información que el crítico de este periódico, es decir un servidor, daba sobre la grabación de un CD con obras de Conrado del Campo y registrado por el mencionado Dúo, procedía de fuentes poco fiables y no contrastadas al referirse a la existencia o no de grabaciones anteriores a las obras de Conrado del Campo. Sin embargo, al igual que a ustedes no les consta que fueran grabadas estas obras con anterioridad, a mi me consta que no ha sido así (otra cosa es que se hayan editado), según la hija del compositor, Elsa del Campo. «Por los años cincuenta y sesenta, se grabaron en el Círculo de Bellas Artes de Madrid por RNE, muchas obras de mi padre, entre ellas, la Sonata». De igual modo nos lo han manifestado el violista Emilio Mateu Nadal, catedrático de viola del Conservatorio de Madrid, quien estrenó la otra Romanza, ahora para viola y piano en Fa Mayor registrándola posteriormente para el sello Kirios, dentro de la serie Música de salón. El prestigioso catedrático nos confirmó que las Romanzas al igual que la Sonata «se interpretaban a menudo en el Círculo de Bellas Artes y en otros salones de Madrid, donde rara era la ocasión en la que no se grababan los conciertos. A mi me registraron la Romanza y tengo entendido que la Sonata de Conrado del Campo, aunque de esta no tengo un dato concreto». Una tercera fuente ha sido el famoso pianista Miguel Zanetti, que por aquel tiempo también interpretó obras del compositor y volvía a repetir lo dicho por los anteriores: «Se registraba todo lo que se estrenaba y Conrado no iba a ser menos. Creo que además de la Romanza, de la que hay constancia, existen otras para viola y violín de las que se hizo grabación». Las fuentes, entonces, no están sólo en la Fundación Juan March, ni en catálogos y diccionarios. También están en fondos familiares y en testimonios directos de intérpretes que se acercaron a su obra. Respecto a que «el descubrimiento de dos compositores españoles como los recogidos en este disco, ayude a comprender mejor el estilo y la música de nuestros compositores (Rogelio Villar y Fernández Blanco)», nada más lejano de la realidad porque Rogelio Villar era cinco años mayor que Conrado y muchas de sus obras fueron tocadas por el propio Conrado del Campo junto al Cuarteto Francés, así que mal le iba ayudar Don Conrado a descubrirse. Y para terminar Evaristo Fernández alumno directo del maestro madrileño tiene una trayectoria tanto musical y estética tan cercana de la de Conrado como del canto gregoriano. Por otro lado, en ningún momento he puesto en duda el trabajo que ustedes hayan tenido que hacer de transcripción de las partituras que no del hallazgo de las mismas, ya que como he podido comprobar yo mismo, al igual que ustedes, son fácilmente localizables en la Fundación Juan March donde están a disposición del público que desee consultarlas o fotocopiarlas. En cuanto a lo de que «aún hay gente que ve fronteras por todas partes», lo único que veo son las fronteras de la ignominia y de la ignorancia tras la que algunos intentan mantener a nuestros compositores durmiendo el sueño de los justos mientras que otros, se empeñan, por intereses personales y crematísticos, en querer taparnos los ojos con una de cal y otra de arena para dejar «su conciencia leonesa tranquila».

tracking