Eutiquio Quijada convierte en forja y en arte los instrumentos populares de León

Eutimio Quijada trabaja el hierro en el yunque de los antiguos ferreros, golpe a golpe lo va domando hasta transformar su dureza en docilidad. Y del milagro nace la poesía, versos en forma de flores delicadas que viven más allá de su férrea estructura, o milagrosos instrumentos musicales, que dejan así su imagen eternizada en el metálico elemento. Quijada trabaja el hierro con asombrosa facilidad y como mejor muestra de su labor nos encontramos con la colección de Instrumentos tradicionales de la música leonesa , que ahora pueden verse en la galería Sharon Art. La folklorista Concha Casado, que es de alguna manera su descubridora, o por lo menos la inductora de que el artista se haya decidido a representar en hierro los instrumentos musicales del folclore leonés, dice sobre Eutimio Quijada: «El artista tiene una intuición extraordinaria para asociar obras humanas (los instrumentos musicales) con la naturaleza (las flores y plantas que los acompañan). Porque, efectivamente, la música tradicional tiene un aroma de naturaleza y sin ella no se entendería». Quijada comenzó a interesarse por la fragua en los talleres de la Renfe, en los que trabaja desde hace muchos años. Sus compañeros adivinaron las cualidades que escondía y le animaron a profundizar en la concepción artística de este trabajo. «Yo -confiesa el artista- prometí a dos que ya murieron, a Ramón Rodríguez y Gonzalo Fernández, que intentaría por todos lo medios seguir haciendo lo que ellos me enseñaron, y por eso he llegado aquí». El artista se confiesa admirador de las flores y la música y por ello representa una y otra vez en sus obras delicadas plantas junto a los instrumentos musicales más típicos de la región leonesa, guitaras, flautas, tamboriles, panderos, rabeles, acordeones... en todo un concierto de hierro y belleza. «Esta exposición -comenta, por su parte, el catedrático Antonio Natal- es un encuentro de la música que todos llevamos dentro, con el perfume bronceado del metal. Simboliza el latido de la materia, el aroma de la naturaleza en estado puro». Nuevas aventuras Pero Eutimio Quijada, que con esta exposición se lanza a la aventura artística, no está anclado en las representaciones musicales, entre sus proyectos en marcha figura una colección de diferentes figuras del Quijote, de las que ya tiene realizadas cerca de la veintena. Con ellas realizará una nueva exposición en las salas del Auditorio de Música de León. «Son esculturas -nos comenta el artista- de gran tamaño, algunas llegan casi a los dos metros de altura, creo que serán para el público todavía más sorprendentes que estos instrumentos». La inauguración de la muestra estuvo ameniza por el grupo neo folk leonés Renuberu, que en un improvisado concierto que tuvo lugar en la propia galería de arte interpretó diversas melodías tradicionales del Viejo Reino con los mismos instrumentos que Eutimio Quijada ha tomado como modelos para sus esculturas en hierro: la gaita, los panderos o el acordeón diatónico. Horario: De 18.20 a 21.30, de martes a domingo. Sharon Art está en la calle Cervantes, 10.