Subasta

AL MARGEN quien se haya llevado la Copa del Rey de fútbol, lo curioso estuvo en sus preliminares, la subasta de derechos. Porque fue una subasta. La empresa propietaria los ofreció primero a TVE que propuso 500.000 euros, cantidad muy a la baja sobre el total exigido de 5,5 millones. Entró en la puja Antena 3 que subió a 650.000. Finalmente sería Tele 5, junto a Canal Sur y ETB, las cadenas que darían el Osasuna-Betis, aunque sin trascender la cantidad abonada, por lógica, superior a las cifras anteriores. El lote incluye los dos partidos de la Supercopa, que es como regalar un helado a un esquimal¿ ¿Hizo TVE lo correcto al renunciar a la puja? Quizá haya hecho bien en cuanto a retorno a la realidad, esa que coloca al fútbol en su justo lugar, alejado de aquel (muy interesado) latiguillo del «interés general» que el ministro Cascos acuñara hace pocos años, y que originó un tinglado económico de consecuencias todavía por culminar. Pamplonicas y sevillanos habrán disfrutado, pero al resto ni fu ni fa. Una tele pública debe alejarse del circo del share y renunciar a adorar al dios del liderazgo de audiencias. Casi seis millones de euros por 270 minutos, se parece a una indecencia, pese al legítimo derecho de la empresa propietaria a pedir lo que tenga a bien. Tele 5 habrá liderado la jornada de ayer, vale. ¿Y?...