Diario de León

fútbol. primera división

Apoteosis en la Cibeles

El Real Madrid celebra el título de Liga arropado por más de 50.000 aficionados y con una caravana espectacular desde el Bernabéu hasta la diosa blanca. Casillas promete la Décima para el próximo año.

Özil, Benzema, Pepe y Marcelo, en primera fila, festejan la Liga en el autobús del Real Madrid que llevó al equipo desde el Santiago Bernabéu hasta la plaza de Cibeles, donde esperaban miles de aficionados.

Özil, Benzema, Pepe y Marcelo, en primera fila, festejan la Liga en el autobús del Real Madrid que llevó al equipo desde el Santiago Bernabéu hasta la plaza de Cibeles, donde esperaban miles de aficionados.

Publicado por
javier bragado | madrid
León

Creado:

Actualizado:

Ni Mourinho. Ni los brasileños. Ni Cristiano Ronaldo. Fue Iker Casillas quien emergió como animador de las celebraciones del título del Real Madrid con su omnipresencia, sus minutos extravertidos y la coronación de la fiesta con la bufanda al cuello de la diosa Cibeles. El capitán, que había asumido un papel secundario durante el resto del año, se desquitó ante más de 50.000 aficionados madridistas con múltiples muestras de afecto en la celebración del 32º título de Liga del Real Madrid.

«Nos llevamos fatal...», ironizó el portero mostoleño en facebook con una foto con el técnico José Mourinho antes de iniciar el desfile por el paseo de la Castellana. Subió el primero en solitario al autobús descapotable con matrícula personalizada ‘R-Madrid’ y decorado con imágenes de los jugadores. Mientras esperaba, sus compañeros insistieron en sus apoyos al entrenador. «Esta foto sí que es con otro grande...le pese a quien le pese... El gran Mou...», compartió Sergio Ramos en twitter.

La lluvia pareció desanimar a los pocos aficionados que les escoltaron hasta el Palacio de Correos. Aunque los brasileños del equipo trataron de levantar el viaje por el Paseo de la Castellana. El bromista Marcelo y Pepe comandaron en primera línea la alegría que trataron de prorrogar Di María, Adán, Khedira y Özil al frente de la comitiva blanca. Fotos, vídeos y Mourinho enseñando el dedo a los madridistas —esta vez el pulgar— salpicaron el trayecto más deslucido sobre el autobús con el lema en sus paredes ‘32 Real Madrid’.

Sin embargo, fue la llegada a la plaza de la Cibeles la que disparó la euforia de los miles de aficionados que les recibieron a gritos. «Así, así, así gana al Madrid», fue el cántico de bienvenida. Incluso el sol apareció para vivificar la verbena.

Entonces los futbolistas dejaron a un lado sus teléfonos móviles para festejar con sus seguidores. En el lugar en el que tradicionalmente celebran los aficionados los títulos del Real Madrid los deportistas, cuerpo técnico y hasta alguno de los hijos de Mourinho desfilaron por una pasarela situada alrededor de la estatua de la Cibeles.

Pero de entre todos destacó Iker Casillas con celebraciones en solitario, gestos particulares de dedicación a los presentes para finalmente, embriagado de alegría, besar el escudo de la camiseta conmemorativa personalizada para el acto. «Esta afición se lo merece todo. Volveremos con la Décima», explicó muy animado Iker a Real Madrid Televisión. La anécdota más comentada ocurrió cuando Casillas se cayó en pleno desfile alrededor de la Cibeles. Fue el clímax del jolgorio.

Solo Pepe pareció restar protagonismo al show del capitán cuando se saltó el protocolo para rodear la estatua y acercarse a los aficionados. Le siguieron algunos compañeros a la carrera mientras Casillas se dedicaba al casi sacramental proceso de anudar una bufanda alrededor del cuello de la escultura. Tras el parsimonioso proceso, el portero terminó agarrado a Cristiano para despedirse de los aficionados después de una hora de festejos en la que el portugués otorgó el primer plano a otros.

Una vuelta de honor del autobús al lugar bastó para coronar el evento. Dos caballos blancos de seguridad abrieron el camino de la despedida con el solemne himno madridista cantado por Plácido Domingo en el camino de celebraciones más íntimas o compartidas solo en las redes sociales

Dos horas de alegría y embelesamiento entre aficionados y jugadores que sellaron con el éxtasis de Casillas el deseado título blanco a pesar del regusto amargo de la eliminación en las semifinales de la Liga de Campeones. «Lo hemos pasado fenomenal», resumió Cristiano.

tracking