Cubelos se da un baño de oro

Oro bañado en agua para Francisco Cubelos. Y segundo éxito para los representantes leoneses en los Juegos Mediterráneos. Si el martes la gloria era para Lidia Valentín en halterofilia, ayer la gesta la protagonizaba el palista berciano con su triunfo en la final de K1-1.000 en aguas tranquilas.

Cubelos ya había dejado patente en las aguas del Adana Seyhan Dam sus credenciales para el oro. Fue en las eliminatorias donde no sólo superaba al resto de rivales, también contabilizaba el mejor tiempo. Era el primer paso hacia la gloria que sellaba en una final en la que sólo el esloveno José Zakrajsek pudo seguir su estela. Y eso que como ya sucediera el jueves el palista leonés no firmaba una gran salida por la calle cuatro. Prueba de ello es que al paso por los 250 metros ocupaba la cuarta posición. Su tiempo de 53:34 era superior al del italiano Greña que con dos segundos de margen volaba sobre las aguas turcas. Por detrás el serbio Zoric y el turco Kose se colocaban justo delante de Cubelos.

El berciano, de menos a más, aparecía ya en la tercera posición por el ecuador de la carrera. No era preciso gastar más fuerzas de las necesarias para el final. Cubelos lo tenía claro y con un ritmo de 51:83 se situaba ya a la estela de Crenna y Zakrajsek que por la calle seis había remontado nada menos que siete posiciones.

Pero la batalla definitiva no sólo por el podio, también por el peldaño más alto, iba a producirse a partir de los 600 metros. El palista leonés imprimía a partir de esa distancia un ritmo frenético que dejaba la prueba en un mano a mano con su rival esloveno. Crenna se desfondaba y suficiente hacía con mantener la tercera plaza ante el acoso del tunecino Mrabet. Mientras, por delante Cubelos tenía que lidiar con un Zakrajsek que a falta de 250 metros para el final le aventajaba en poco menos de dos segundos. Ahío la calidad y cadencia de paladas de Francisco Cubelos, la de uno de los mejores palistas a nivel internacional, hacía acto de presencia para no sólo enjugar en apenas 15 metros la distancia que le separaba del esloveno, también para superarle en los metros finales y llevarse la gloria con el oro. Con 3:31.42 y un ritmo de paso en los últimos 250 metros de 48:68, el leonés disfrutaba, emocionado y satisfecho por su actuación, de una merecida presea dorada, la de campeón en unos Juegos en los que ha demostrado su calidad. Por detrás, Zakrajsek se colgaba la plata (3:32.24) y el italiano Crenna el bronce (3:36.73).