El sistema de videoarbitraje deja claro que el gol del empate de los iraníes no fue legal

La selección de Irán celebró su gol del empate ante España —que a la postre sería anulado por el árbitro— como si de la final del mismísimo Mundial se tratase. Y no era para menos. Sin jugar a nada habían logrado igualar un encuentro que les dejaba, en ese momento, con cuatro puntos. Pero el VAR entró en acción y dejó claro que había posible fuera de juego y mano clara del autor del gol.