El conjunto berciano anima el mercado de fichajes del grupo
Entre los muchos cambios experimentados por la Deportiva esta temporada con respecto a las anteriores están los tiempos en la realización de los fichajes. Ya se pudo ver en verano y ahora vuelve a suceder. El equipo blanquiazul empezó la pretemporada con casi todos los integrantes del plantel a las órdenes de Bolo. A los pocos días del anuncio del fichaje del entrenador ya se habían concretado más incorporaciones que el curso anterior en los dos meses posteriores al final de la Liga 2016-2017. Bien es cierto que Terrazas también tuvo que hacer un «trabajo sucio» y poco gratificante para limpiar la plantilla.
Después de muchos años en los que la premisa era la de esperar al avance del mercado invernal y que los jugadores comenzasen a ponerse nerviosos, esta temporada la Deportiva ha ido por delante. Antes de disputar el partido previo a las vacaciones navideñas ya había cerrado una incorporación y antes de que se abra el mercado ya tiene tres. En los últimos años sí que llegaron pronto Mandaluniz o Arrizabalaga, pero otros cayeron a última hora como David Gómez o Guille Donoso. E incluso, en términos baloncestísticos, se comió la posesión esperando hace casi tres años por Ferrán Corominas, que le tomó el pelo al club y cuando todo parecía hecho en los últimos minutos del mercado, no le volvió a coger el teléfono al club blanquiazul.
Falta por concretar la salida de un futbolista para poder tener a todos los fichajes disponibles, pues a día de hoy se rebasa en una el número de fichas supra-23 permitidas. El club ya le ha comunicado al aludido la decisión, aunque no la hecho pública. Todo apunta a que será un centrocampista de carácter ofensivo el que abandone la disciplina del conjunto ponferradino tras hacerlo antes Luisma Villa y David Gómez.