PRIMERA DIVISIÓN
El Celta sube a lo más alto
Mostovoi, el zar ruso, protegió con su calidad y con sus dos goles el pleno del Celta, que logró su tercera victoria consecutiva y demostró su buen momento con una clara victoria a domicilio sobre el Recreativo, que aún no ha lo
La férrea defensa del Celta impidió cualquier atisbo de peligro onubense a lo largo del partido
La lesión del canterano Ignacio Benítez obligó a cambiar el orden táctico del cuadro andaluz, y ello dio sus frutos, por cuanto los onubenses comenzaron a dominar la contienda y a llegar con más peligrosidad al portal del argentino Cavallero. En el minuto 32 un buen remate de volea de José Mari obligó al portero del Celta a hacer una gran parada, que repetiría en el 42 en una buena penetración de Espínola que Raúl Molina remato pero que fue abortada por el arquero en la misma raya. Y ahí apareció la calidad de Mostovoi. Inmediatamente, y tras un rechace de Alex, el balón llegó al ''zar'', que desde 35 metros empalmó un disparo que se coló junto al poste izquierdo. Era la primera gran llegada del conjunto vigués y le sacó el máximo provecho. Tras el descanso, el Recreativo salió dispuesto a nivelar el marcador, pasando a dominar el encuentro y obligando al Celta a multiplicar sus esfuerzos defensivos. En el minuto 61, tras el lanzamiento de un córner, José Ignacio derribó a Alex y el correspondiente penalti fue lanzado por Oscar Arpón a la derecha de Cavallero, quien intuyó el disparo y logró desviarlo a córner. Fallo determinante El error en la pena máxima fue clave, puesto que a partir de ahí el Recreativo perdió confianza en sus posibilidades y diez minutos después (71), en un rápido contragolpe, Mostovoi estableció la sentencia con un remate por bajo. A partir de entonces, con un Recreativo completamente hundido, el Celta mandó como quiso, llegó con suma facilidad al área contraria y cuando se jugaba el descuento un servicio de Mostovoi al surafricano McCarthy permitió a este cerrar la cuenta. A pesar del 0-3 en el marcador, la afición recreativista reaccionó con calor hacia sus jugadores y les ofreció una gran ovación.