La Deportiva puede anunciar hoy sus primeros refuerzos sub 23

La Sociedad Deportiva Ponferradina sigue trabajando en la confección de la plantilla para la próxima temporada y en la jornada de hoy podrían cerrarse las contrataciones de los primeros fichajes de cara al año venidero. No será fácil porque las gestiones que están manteniendo tanto el secretario técnico Jesús Tartilán como el propio entrenador, Miguel Ángel Álvarez Tomé, están resultado más laboriosas y complicadas de lo que cabía esperar en un principio. Este pasado fin de semana los dos han estado viendo partidos correspondientes a las fases de ascenso tanto a Segunda B como a Segunda División A. El técnico se ha desplazado todo el fin de semana a la zona centro de la península, para ver en directo varios partidos en la Comunidad de Madrid, donde pudo seguir las evoluciones de jugadores que interesan a la entidad. Con toda la información recopilada, esta tarde habrá cónclave técnico en el Estadio del Toralín, con Tomé al frente y con Tartilán y Nistal como adjuntos. De ese encuentro pudieran surgir los primeros nombres definitivos, después de tantos rumores, acerca de la idéntidad de los futbolistas que vestirán la elástica blanquiazul el año que viene. Pantiga, entre los pretendidos El central sub 23 de la Unión Popular de Langreo, Pantiga, figura en la relación de pretendientes que maneja el cuerpo técnico ponferradino. Se trata de un futbolista interesante de cara al futuro que además tendría relativamente sencillo desvincularse de los azulgrana, dado que este domingo cayeron de nuevo a la Tercera División después de perder en Calahorra por 2-1 y haber empatado en Ganzábal sin goles. Se supone que la directiva asturiana no frenará la proyección de lugador, «condenándole» a militar una temporada en la Tercera División del Principado. Pablo Pantiga Sariego, que así es como se llama, nación en Gijón el 18 de junio de 1.981, por lo que cumplirá mañana 22 años. Tiene altura suficiente como para pelear los balones aéreos, como ya demostró en El Toralín, aquella noche de febrero cuando se disputó el encuentro aplazado en su día por culpa de la helada que registraba el feudo deportivista. También fue de lo poco salvable en el choque postrero de la temporada regular en Ganzábal, donde la Deportiva y el Langreo firmaron un empate sin goles. Los propios aficionados asturianos, que ya empezaban a verle las orejas al lobo aquel 18 de mayo, reconocían que Pantiga era la principal apuesta de un equipo condenado a sufrir para mantener la categoría, como de hecho así ocurrió con el fatídico final que se produjo el domingo en Calahorra. Pantiga mide 181 centímetros y pesa 80 kilos, por lo que cuenta con una complexión física adecuada para ocupar esa demarcación de central que pretenden cubrir los técnios blanquiazules de cara al año que viene y después de las bajas que se han concedido a jugadores que ocupaban ese mismo puesto. Sería el sustituto de Aira Dado que la Ponferradina le dio la baja a dos centrales, que son César y Aira, se están realizando gestiones encaminadas a encontrar dos futbolistas para ese puesto que respondan a las mismas características que los que se fueron. Es decir, habría que ficha un central de «primer nivel» para tomar la ficha senior que dejó libre César, mientras que haría falta otro más con menos de 23 años con el fin de desarrollar un rol idéntico al de Carlos Aira. Sería deseable que Pantiga, caso de ser fichado, tuviera mejor fortuna que el ponferradino, ya que éste apenas pudo jugar por culpa de la lesión que arrastraba cuando llegó al club y porque el técnico, Simón Pérez, tampoco le dio apenas opciones de jugar. Aunque fichar un central senior y otro sub 23 parece lo más lógico, tampoco se descarta contratar a un defensor de garantías y a otro futbolista que pudiera defenderse sin problemas en dos puestos, compatibilizando por ejemplo la demarcación de central y de lateral. En este sentido, Tomé advirtió en su presentación que lo ideal era contar con dos jugadores por puesto, aunque eso no es fácil.