Diario de León

Ricardo y Chobo no ceden el segundo puesto en la tabla

A pesar del buen juego de Alberto y Amilivia la pala corta suma por derrotas sus partidos

Ricardo sigue mostrándose intratable en los partidos de paleta disputados hasta ahora

Ricardo sigue mostrándose intratable en los partidos de paleta disputados hasta ahora

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Tasio - león
León

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El Campeonato de España de Clubes sigue avanzando. El pasado fin de semana, se disputó la tercera jornada y el Club de Pelota Leonés puso rumbo a Bilbao para enfrentarse al Pelotazale de Plentzia. Este club había ascendido de Tercera División y los leoneses desconocían su potencial deportivo. De todas formas, cuando se viaja al País Vasco, en este mundo de la Pelota, las prevenciones y el respecto por cualquier club se acrecientan. De todos es sabido que allí, precisamente allí, abundan los buenos pelotaris. Se practica este deporte mucho más que otros. Disponen de instalaciones y frontones cubiertos por doquier y las escuelas para chavales proliferan para adiestrarles en esta disciplina. Por lo tanto, la prevención y el respeto se hacen patentes y los clubes del resto de España, en sus visitas deportivas a Euskadi, se «atan los machos» por lo que pueda acontecer. El Club de Pelota Leonés conjugó un equipo para este compromiso muy equilibrado y con posibilidades de triunfo al menos en alguno de los dos partidos en disputa. La modalidad de paleta, como no podía ser de otra forma, la defenderían los leoneses Ricardo y «Chobo». En pala corta, el asturiano Alberto y Amilivia tendrían la responsabilidad y el compromiso de conseguir el primer triunfo en esta difícil disciplina. De esta guisa el Club Leonés puso rumbo hacia Plentzia. Los partidos estaban programados para el pasado sábado por acuerdo entre los clubes. El pueblo vasco de Plentzia dispone de un frontón largo de donde han salido afamados pelotaris de pala larga, hoy en el mundo profesional, como Unda y Gaubeka. Al no poder disputar los partidos en esta instalación, los leoneses se vieron forzados a desplazarse al pueblo costero de Armintza, distante unos 15 kilómetros. Respeto mutuo Ricardo y «Chobo», junto a Zubizarreta y Goikoetxea, pareja de Plentzia, comenzaron el partido de paleta con respeto mutuo y estudiándose los unos a los otros. Una pequeña ventaja en el marcador, por parte de los vascos, hizo aflorar los nervios en Ricardo y «Chobo» y el sudor en el resto del equipo que miraba desde la grada. No cabía la menor duda de que vistos los prolegómenos de la refriega la pelea por el triunfo resultaría ardua y difícil. Los leoneses, recubriéndose de sangre fría y dejando a un lado la sensación de inferioridad, empezaron la remontada. Sacaron pelota nueva. Aposentaron los pies sobre la cancha y pareció que todos escuchamos: «vamos a ver lo que pasa aquí». Una, dos, tres y cuatro. Los tantos empezaron a encajar en el marcador a su favor. Ricardo que en los primeros compases parecía un poco despistado, volvió en sí, y el sonido de su paleta empezó a resonar en el frontón. Hace años que a «Chobo» no lo veíamos tan motivado. También es verdad, que hace muchos años que «Chobo» no ganaba partidos. Este entusiasmo que tiene él mismo y el apoyo contundente y firme que recibe de Ricardo y del que carecía en otras temporadas, por no jugar juntos, le han transformado. Salvó a Ricardo del desbarajuste en los primeros tantos y luego, como siempre, en su sitio y sin echar un paso atrás. Con este guión tan formidable, cualquier obra de teatro resulta ser un gran éxito. Así fue. Ricardo y «Chobo» consiguieron el cartón 35 dejando la labor, también meritoria de los vascos Zubizarreta y Coikoetxea, en 28 tantos. De nuevo, el partido de pala corta no pudo puntuar, a pesar de que Alberto y Amilivia lo intentaron desaforadamente. Un pinchazo en el gemelo de su pierna izquierda, que Amilivia sufrió en el meridiano del partido, pudo ser la causa. También, y si a eso le sumamos que la rodilla izquierda de Alberto restalló en los últimos tantos, parecen suficientes motivos para perder por la apretada diferencia de 40-36. García-Núñez del Plentzia no eran dos «peritas en dulce». Arreaban estopa de lo lindo y aprovecharon el bajón debido a las lesiones de los leoneses, cuando el partido andaba por el 35-32 a su favor, para dar la puntilla definitiva. Fue una pena, pues Alberto y Amilibia pudieron haber ganado por escasa diferencia, sí, pero ganar. Esta semana los partidos se disputarán el sábado a las seis de la tarde en el frontón universitario. Los leoneses recibirán la visita del Club D'Elhuyar de Logroño.

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