Diario de León

El Recreación recurre a «Marte» para vencer a la Cultural en casa (1-0)

El novio de la colaboradora de «Crónicas Marcianas» Marta López da a su club la victoria

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Ángel Fraguas - logroño | enviado especial
León

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La Cultural sigue sin conocer la victoria lejos de su terreno de juego. En el estadio Mundial' 82, pese a progresar en el juego desplegado, no fue capaz de aprovechar dos claras ocasiones, sobre todo la de Willy, cuando se encontraba en inferioridad numérica, y propició el primer triunfo del Recreación en su propio escenario de juego. El gol y los tres puntos para los de casa se debieron a una ayuda casi «extraterrestre», porque su autor fue el novio (o amigo íntimo) de la colaboradora de Crónicas Marcianas Marta López. Jorge Cabeza (que llegó a jugar con el Logroñés en Primera División) se aprovechó de un error defensivo visitante para anotar el tanto de la victoria, con Marta López en las gradas. Mientras, García Cantarero actuó en el estadio Mundial'82 como si no estuviera sancionado. Las condiciones del campo riojano le posibilitó estar justo al lado de su banquillo, aunque por detrás de las vallas. Sus lugartenientes José Manuel Sevillano y Javi le ayudaron en la tarea de transmitir órdenes hacia los protagonistas que saltaron al césped. Sólo un cambio presentó finalmente la alineación inicial de la Cultural con respecto a la de la pasada jornada ante el Alfaro. Miguel Alfonso adquirió una de las plazas del centro de la defensa en detrimento de Negral. Cantarero quiso asegurar el juego aéreo en defensa con la presencia del maño, que se desenvolvió a la perfección en este cometido. El equipo leonés adquirió presencia en el centro del campo desde el inicio. Soto se mostró solícito en la recuperación de balones, mientras que Puigdollers se dedicó a repartir juego hacia ambas bandas. Tanto Willy como Perona se esforzaron en este cometido, con acciones de velocidad por ambos carriles, pero sin la capacidad de poder con sus respectivos pares. Los minutos de partido transcurrieron con excesivo juego insulso en la medular sin que ninguno de los dos bloques llegara con excesivo acierto a las inmediaciones de ambas áreas. Sin embargo, el control del juego y del balón correspondió siempre al conjunto leonés, aunque este aspecto caducó a raíz de la expulsión de Puigdollers en el minuto 29 de partido. El bloque leonés acusó este golpe de inmediato. El Recreación de La Rioja, en superioridad numérica, se creció a partir de la expulsión del mediocentro culturalista. Las llegadas riojanas se hicieron casi continuadas, aunque sin demasiado tino en cuanto a la triangulación del balón y siempre a base de colgar balones hacia el área de Raúl Moreno. Los últimos minutos de la primera parte se caracterizaron por la insistencia de los propietarios del terreno, pero sin las ideas muy claras para acceder con cierto criterio efectivo a la portería leonesa. La mejor oportunidad para inaugurar el marcador la disfrutó el delantero centro local Martín, que con todo a su favor remató con la testa fuera de los tres palos. Con el marcador sin estrenar se retiraron los dos equipos al vestuario. Los segundos cuarenta y cinco minutos se presumían intensos, con una Cultural en inferioridad numérica, pero con la necesidad de vencer por primera vez lejos de su estadio en la presente temporada, al igual que el Recreación, pero el club riojano en su propio feudo del Mundial'82, que de momento no había sido talismán para los entrenados por Rubén Galilea. La segunda mitad se caracterizó por la igualdad de fuerzas, sin que se notara que la Cultural jugara con uno menos. La presencia de Pepín en la parcela ancha, junto con los apoyos continuados de Perona, dieron al bloque leonés el trabajo extra necesario para esconder la falta de un futbolista. Incluso, el bloque leonés gozó de mejores oportunidades para marcar, con acciones muy peligrosas de Paulino y de Pepín, que entre los dos se las ingeniaron para dinamitar a la defensa riojana. Pero fue Willy el que erró la más clara, que pudo sentenciar el choque. El equipo leonés le esperaba todavía otra dura prueba. La expulsión de Pepín por doble cartulina amarilla en el minuto 68 puso el envite deportivo demasiado difícil para las aspiraciones leonesas de sacar un resultado positivo de tierras riojanas. El Recreación intensificó su dominio en cada una de las zonas del campo. Presionó a los culturalistas en la zona de creación. El entrenador García Cantarero dispuso de inmediato la presencia en el césped del todoterreno Rubén Suárez, que así retornó tras su rotura de fibras, sufrida en la primera jornada ante la Real Sociedad B. Pese a que los leoneses jugaron con dos menos el último tramo del choque, los culturalistas trabajaron a destajo para no ver perforada su portería en los últimos compases del encuentro. La entrada de Negral para fortalecer el centro de la cobertura llevó a la caseta a Perona. La Cultural se defendió con orden ante las acometidas de los locales, aunque casi siempre a base de balonazos. Pero tantas veces fue el cántaro a la fuente que acabó por romperse, justo cuando la Cultural más a mano lo tenía para hacerse con un punto y no salir derrotada de un estadio en el que los dos primeros rivales del equipo de casa se habían llevado los tres puntos. La ayuda «marciana» surtió efecto.

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