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| Reportaje | Distintos en todo |

El Mozart del tablero se mide a Anand en la otra semifinal

El ex campeón del mundo tendrá como rival al joven prodigio noruego, Magnus Carlssen, en una partida que se presenta como una de las más espectaculares que se podrán ver en el torneo

El ex campeón mundial, Anand, a la derecha, saluda al joven prodigio noruego Magnus Carlssen

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M. A. Nepomuceno - león
León

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No ha sido esta edición del Magistral propicia a Shirov, el español se ha encontrado con un campeón realmente inspirado, seguro y luchador que no le ha dado resquicio a la hora de mostrar su mejor juego y ha tenido que resignarse con lo peor. Tras las tablas de la segunda partida la tercer fue una repetición de la primera. Apertura peón rey de Shirov, Defensa Siciliana variante Najdorf y desviación de la línea principal en la movimiento noveno con a3. El campeón mantiene su parsimonia frente a un Shirov algo más nervioso pero muy concentrado. Golpe y contragolpe en la apertura para entrar en una novedad teórica que introduce el campeón en el movimiento 16. Los cronos a 17 minutos para Kasindanov y a 20.31 para Shirov. Enroques largos de ambos y apertura del centro por parte del segundo jugador. Tras una larga reflexión y amagos de ataque Shirov se decide entregar una pieza, no sin antes lanzar una mirada fugaz al campeón. Este hierático, mantiene su tronco erguido como esperando el golpe. Como quien lo tiene todo meditado Kasinzdanov captura el regalo y se dispone a la defensa activa. El tiempo juega a su favor. 8 minutos en su reloj contra 3 de su rival. La torre entregada no le otorga compensación alguna y la ventaja es decisiva para el negro. Con golpes rápidos Kasinzdanov fuerza simplificaciones que le van acercando veloz a la victoria. Shirov desesperado, se convence que aquello ya no da para más y hace rodar su rey por el tablero en el movimiento 43. La suerte está echada y el Campeón del Mundo se ha clasificado para la final a falta de una partida que no decide el resultado. 2,5-0,5 para Kasindzanov y la resignación más amarga para Shirov. El match ha sido tan emocionante como se esperaba y Espejo, el árbitro, detiene los relojes, limpia el campo de batalla y dispone los trebejos para la última batalla que no decide la guerra pero si incrementa la afición. Tablas en la cuarta partida Calma crepuscular. Sin nada que dilucidar y con Shirov resignado ante la evidencia se dio inicio la cuarta y última partida que no decidía nada pero mantenía la inercia de la tensión. El gran maestro español, comentó al finalizar que Kasindzanov había jugado tremendamente bien, con una garra inusitada y le había sorprendido. «Ha sido superior en esta modalidad y es el vencedor con todos los merecimientos» dijo deportivamente Shirov una vez finalizado el encuentro. Un match que había llegado a la última partida con la decisiva ventaja para el campeón del mundo de 2,5 a 0,5, que le daba la clasificación automática para la final de la jornada de mañana. La última partida fue una Defensa Siciliana que Alexis planteó con decisión ante un Shirov que ya no tenía nada que perder. El blanco volvió a jugar con la agresividad que le caracterizó durante todo el encuentro y diseñó un Ataque Rossolimo para evitar la agresiva variante Pelikan.  Pronto se llegó a una posición con la que ambos jugadores se encontraban muy familiarizados, por lo que las jugadas se sucedían rápidamente hasta que las blancas comenzaron a crear amenazas en el flanco de Rey. Mientras juega con las piezas capturadas girándolas entres sus dedos, kasindzanov va adquiriendo no sólo ventaja de tiempo sino de posición. Su mejor esqueleto de peones y la pequeña ventaja de alfil contra caballo, le otorga una iniciativa duradera que no satisface demasiado a Shirov quien busca a toda costa contrajuego entregando un peón. El poco material existente sobre el tablero y la actividad de las piezas de ambos jugadores hacen que la nulidad sea ineludible. Tras lanzarse una fugaz mirada ambos grandes maestros extienden sus brazos para firmar el armisticio que llegó en el movimiento 36, cuando aún las blancas, es decir Kasindzanov mantenía un suculento peón de ventaja. Anand y Carlsen volverán a encender la llama hoy donde sólo quedan ya cenizas. Una vez conocido el vencedor de la primera de las dos semifinales que ayer tarde se disputó en el Auditorio de la Junta, hoy toca el turno a los otros dos grandes maestros. El excampeón del mundo Anand tendrá como rival al joven prodigio Magnus Carlsen, en un encuentro que tiene todos los visos de ser uno de los más espectaculares dadas las características de ambos rivales. El gran maestro hindú ha mantenido siempre un estilo clásico. Se le podría definir como un purista del juego que busca la victoria sin llegar a límites de infarto, pero no quiere decir que su estilo tranquilo no esconda una tremenda ambición y cuando llega el momento y necesita el punto, no duda en lanzarse con todos sus efectivos para desequilibrar el juego. Por su parte Carlsen tendrá al rival más duro en esta modalidad dada la tremenda fuerza de Anand en el ajedrez rápido. Sin embargo que nadie piense que será un encuentro desnivelado hasta el punto que Anand sólo tendrá que colocar sus piezas y empujarlas hacia delante, muy al contrario, Carlsen juega muy incisivo, especialmente motivado por su juventud sino porque es ahora donde tiene que demostrar su fuerza y comenzar la andadura por ese camino que no será precisamente fácil antes de alcanzar la cima en los próximos años. Sus aperturas preferidas son las abiertas y suele abrir sus juegos con e4, mientras que con las piezas negras la defensa Siciliana es una de sus armas favoritas.