La permanencia está muy cara

El grupo B de la 1.ª División Regional de Aficionados puede perder hasta un total de nueve equipos al término de la presente temporada. La inclusión por decreto del Atlético Zamora en la categoría ha elevado a cinco el número de descensos directos, al tener que quedar el grupo reducido a 18 equipos, como es habitual, para afrontar la temporada 2007/08 y tener que ascender los campeones de la 1.ª División Provincial de Aficionados de León, Zamora, Salamanca y Valladolid. Sin embargo, la situación del Real Valladolid B, penúltimo en el grupo segundo de la Segunda División B, y que siete de los ocho últimos clasificados del grupo octavo de la Tercera División recalarán en este grupo en caso de descenso por su situación geográfica, hace que el número de equipos que pueden perder la categoría al término de la actual temporada se eleve a un total de nueve, aunque éste número se podría ver reducido en función del número de ascensos a Segunda División B, en cuyo caso anularía el descenso por arrastre de un equipo más de Tercera División, quedando en ese supuesto en ocho; y si sube uno o dos equipos de este grupo a la Tercera División, en cuyo caso también aminoraría el número de equipos que pierden la categoría al término de la temporada, pudiendo oscilar entre siete o nueve de darse todos estos supuestos. De momento, Benavente, Deportiva B, Cultural B, Íscar, Hullera, Universidad de Valladolid y La Bañeza se encuentran todos ellos junto al Burgos B luchando por lograr la permanencia en la Tercera División. De consumarse el descenso de tres o cuatro de ellos (tres es seguro según la Normativa de Competición) y de mantenerse esta tendencia el grupo B de la 1.ª División Regional de Aficionados puede sufrir una metamorfosis total para la próxima temporada, poniéndose además muy difícil el recuperar la categoría dado el número de equipos que caerán de la Tercera División.