Largas colas en El Toralín antes de que se abriera la taquilla
Tal es el tirón que tiene la Ponferradina entre sus incondicionales que ayer, muchos minutos antes de que se abrieran las taquillas y a pesar de la lluvia que descargaba sobre la capital del Bierzo, ya había medio centenar de socios a la espera de hacerse con sus entradas para este domingo. Y es que de momento sólo se vende papel para los socios. El público en general sólo podrá adquirir su localidad el propio día del partido. El más madrugador ayer fue José Luis Fernández, socio de preferencia desde el año 2000 que se hizo con dos entradas