Pascua, Revuelto y Lima ayudaron a la victoria de España en un partido clave (62-85)

La selección femenina de baloncesto se recuperó del mazazo recibido en la primera jornada ante China con una victoria trascendental frente a Nueva Zelanda que mantiene vivo el objetivo de un cruce accesible en cuartos de final. Con su convincente triunfo ante las neozelandesas, las españolas podrán afrontar sin tanta presión el inmediato choque contra la República Checa, mañana miércoles a partir de las 05.15 horas. España, pese a que aún acusa el bajo estado de forma de Amaya Valdemoro y Nuria Martínez, tiene razones para pensar que los cuartos son posibles, después de someter a su segundo rival con parte de los valores que la han llevado al podio en los cuatro últimos Campeonatos de Europa. Liderada por Isa Sánchez, Anna Montañana y Alba Torrens, que crece día a día, con la colaboración de Lucila Pascua, Mario Revuelto y Cindy Lima, la selección destrozó a Nueva Zelanda con gran superioridad en la lucha por el rebote y mayor acierto en el tiro que su debut. Sin embargo, Amaya Valdemoro estuvo de nuevo negada, ya que falló los cuatro triples que intentó. La capitana colaboró en cambio en el rebote defensivo, una de las principales armas de este equipo que aún debe mejorar mucho para soñar con la hazaña de las semifinales. Bastante es que, con los problemas físicos que arrastra Valdemoro en su pierna derecha y la irregularidad que demuestra esta selección, no tuviese que sufrir en su segundo encuentro.