Los NBA imponen su ley ante España Aito dice que vio a los americanos «especialmente motivados» Gasol: «Es una lección para aprender lo que hay que hacer»

La selección de los Estados Unidos mandó un recado de autoridad a España, actual campeona del mundo, para ahorrarse trabajo el día de una hipotética final con el oro en juego, que es el único escenario en el que ambas formaciones podrían volver a encontrarse. Los españoles y los profesionales a quienes el orgullo de la canasta estadounidense han encargado la misión de recuperar los galones olímpicos se han mirado con recelo desde que los bombos les emparejaron en el mismo grupo. Se respetan, se tiran flores y comparten la experiencia de los Juegos en las tertulias fuera de pista como compañeros de equipo que comparten camiseta al otro lado del Atlántico. Kobe Bryant y Pau Gasol volvieron a verse sobre el parqué semanas después de rumiar la derrota en la final de la NBA ante los Boston Celtics. José Manuel Calderón y Chris Bosh se saludaron en campos contrarios al cabo de la temporada con los Raptors de Toronto. También Jorge Garbajosa entró al envite después de cerrar el paso por la franquicia canadiense. Y así, en general, se conocen y están al día de lo que hay. Y lo que hay es que, al margen de este partido, todos ellos creen que habrá un segundo asalto más adelante -sólo podría repetirse en la final-. Con esa idea, pero vista desde distinta perspectiva, abrieron las hostilidades. La tarjeta de presentación de España en la NBA no puede ser mejor. El aspecto del equipo americano tampoco. Estos hombres han salido concentrados a la cancha todas las noches. El grupo de Mike Krzyzewsky, Coach K , se ha subido las mangas y se aplica al trabajo sin concesiones. Ante España, si cabe, con mayor razón porque la aureola de campeones del mundo y el hecho de mantener una relación tan estrecha ha espoleado a los norteamericanos con intensidad. Los jugadores del Tío Sam no pueden ocultar que juegan ávidos de reafirmarse ante el mundo entero. España constituye la mejor pasarela posible para avanzar en la rehabilitación de la imagen perdida, así que ni el Coach K ni y sus hombres ocultaron nada. Tampoco lo habían escondido en los choques precedentes. Desde el punto de vista norteamericano, por tanto, lo adecuado pasaba por seguir el mismo ritmo machacante y dar un aviso a la selección que mayores posibilidades alberga de plantearles un desafío consistente en la pelea por la cima del podio. El seleccionador de baloncesto, Aíto García Reneses, manifestó que vio «a los americanos especialmente motivados». Tras perder su primer partido en la competición olímpica de Pekín 2008, el seleccionador español manifestó: «hemos perdido y hemos perdido muy claramente. Tenemos que intentar recuperarnos de este partido para el próximo contra Angola y llegar a los cuartos de final con el equipo con más moral de que la que hemos tenido». García Reneses opinó que sí había visto motivación en Estados Unidos por ganar a España, campeona del mundo. «Es bueno ganar contundentemente a los rivales más duros. Eso es una buena actitud» dijo Aito. Pau Gasol se mostró frustrado por la derrota ante Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Pekín y dijo que «es una lección para saber» lo que tiene «que hacer la selección española». «No estoy feliz. Ellos han jugado con mucha más intensidad y no hemos sido capaces de jugar con la misma intensidad. Veintiocho robos de balón es un número con el que no puedes tener posibilidad de ganar», consideró. Gasol elogió el ritmo y el acierto de los americanos a lo largo del partido y dijo que no parece que España hubiera sabido explotar sus armas.«No supimos responder, es muy frustrante estar ahí y no saber responder», dijo Gasol, que añadió «espero enfrentarme a ellos otra vez y haberme ganado esa oportunidad».