Míchel rompe con el Madrid por sus discrepancias con Calderón

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Llega el ariete Huntelaar, que será presentado hoy, pero justo un día antes de cumplirse 25 años del nacimiento de la

se va Míchel, un símbolo del madridismo que ha presentado su dimisión como director de las categorías inferiores del Real Madrid por discrepancias insalvables con Ramón Calderón.

Un golpe en la línea de flotación del presidente ante la asamblea de socios compromisarios del próximo domingo, 7 de diciembre.

Ayer por la mañana, Míchel se reunió en el Santiago Bernabéu con el director deportivo, Pedja Mijatovic, y José Ángel Sánchez, uno de los directores generales, para comunicarles su decisión de abandonar el cargo al no encontrarse a gusto con la política que sigue el club en relación con su

. Intentaron persuadirle de que reconsiderara su decisión, pero la dimisión era irrevocable, a la espera de arreglar los clásicos flecos contractuales.

La noticia sorprendió a Ramón Calderón cuando se encontraba en Telemadrid, la televisión autonómica. «No tengo constancia de ello pero todos tienen la puerta abierta», dijo en un primer momento el máximo mandatario, quien aseguró que Mijatovic confiaba en Míchel y reconoció que no tenía mucho trato con el ex futbolista madrileño porque, según dijo, él tiene su parcela en Valdebebas y el dirigente en el Bernabéu.

La marcha de Míchel deja un ambiente tenso en Valdebebas, la Ciudad Deportiva del club blanco. El dimisionario ha pedido a sus colaboradores en las categorías inferiores que se mantengan firmes en sus puestos, pero la primera intención de algunos de ellos es seguir los pasos del ex jugador, bajo cuya dirección el club ha realizado cerca de sesenta operaciones con canteranos, la mayor parte de los cuales están fuera del club y no siempre por decisión de Míchel.

Míchel, ganador de seis Ligas, dos Copas de la Uefa y dos Copas del Rey, entre otros galardones, con el Real Madrid, volvió al club como técnico como reclamo electoral de Calderón, en junio del 2006. Hace dos temporadas compaginó la dirección de la cantera con el puesto de entrenador del Castilla, bajo cuya batuta descendió a Segunda B. Desde ese momento dejó de entrenar al filial y se dedicó en exclusiva al trabajo con las categorías inferiores.

Calderón siempre criticó en privado a Míchel por no querer entrenar en la división de bronce y desde ese momento le puso un tachón. Tanto es así que, recientemente, cuando parecía cantada la destitución de Schuster, el presidente evitó la posibilidad de ofrecer el cargo al canterano y seguir los pasos del Barça con Guardiola. Prefirió sondear a Miguel Ángel Portugal, el secretario técnico, pero el ex entrenador del Racing dijo que no quería entrenar.

Según fuentes cercanas a Míchel, el ex jugador está molesto tras conocer diferentes comentarios realizados por el presidente en algunos foros donde criticaría su trabajo en la cantera y la reprocharía que hombres como Mata y Negredo no estén ahora en la primera plantilla. Lejos de aceptar su responsabilidad, el ex jugador internacional lamenta que Schuster ni siquiera mire hacia abajo para completar la convocatoria en caso de lesiones, tal y como ocurrió en el reciente choque de Getafe. El fichaje de Huntelaar, todavía lesionado, a cambio de 20 millones más siete por incentivos, cuando el chaval Alberto Bueno pide a gritos una oportunidad, tampoco es una decisión compartida por Míchel.