Berlín aún persigue un impuesto comunitario a las transacciones financieras

El Ministerio alemán de Finanzas afirmó hoy que sigue apostando por acordar a nivel comunitario un impuesto para las transacciones financieras y que mantiene contactos a este respecto con Reino Unido, principal detractor de la iniciativa.

El portavoz germano de Finanzas, Martin Kotthaus, aseguró ante la prensa que Alemania está "centrada" en lograr un consenso entre los 27 miembros de la Unión Europea (UE) en este ámbito. "Estamos claramente centrados en lograr un acuerdo para los 27 y queremos saber rápidamente si una medida en este sentido es factible o no", afirmó. Agregó que el Ministerio de Finanzas confía en saber si es posible alcanzar algún tipo de acuerdo para toda la UE durante el primer trimestre de 2012, para lo que tiene líneas de comunicación abiertas con Londres.

El portavoz del Gobierno, Steffen Seibert, reiteró por su parte que el "deseo" de la canciller federal, Angela Merkel, es aplicar un impuesto a las transacciones financieras a nivel comunitario, sin excepciones.

En caso de que no sea posible un pacto comunitario, Kotthaus explicó que entonces sería necesario que los partidos que conforman la coalición de Gobierno en Alemania decidan el camino a seguir. De esta forma hacía referencia a las disidencias dentro del Ejecutivo, ya que la Unión Cristianodemócrata (CDU) de Merkel contempla la posibilidad de introducir este impuesto sólo en la eurozona si fracasa la negociación a 27 bandas, mientras que los liberales del FDP se niegan.

Seibert indicó asimismo que las conversaciones a nivel europeo para alcanzar un pacto fiscal en marzo discurren dentro de una "atmósfera constructiva" y apuntó que, aunque "aún quedan preguntas por contestar", los avances son considerables. Añadió que Alemania quiere que el freno a la deuda quede claramente fijado en el acuerdo que promoverá la "unión fiscal" y que quien lo incumpla sea "sancionado".

Estas medidas servirán para "reforzar" la confianza en la UE y sus "fundamentos", señaló Seibert.

Estos intensos contactos internacionales serán patentes en la agenda de la semana que viene de Merkel, que tiene previsto entrevistarse en Alemania con el primer ministro búlgaro, Boiko Borisov, el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, el primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt, y el canciller federal austríaco, Werner Faymann.

Además, la canciller viajará a Roma el próximo viernes para participar en una cumbre trilateral junto con el primer ministro italiano, Mario Monti, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, a los que ya recibió por separado en Berlín esta semana.

El Gobierno español confirmó ayer que Merkel recibirá en la Cancillería al presidente español, Mariano Rajoy, el próximo 26 de enero. Todos estos encuentros pretender servir de preparación a la cumbre de líderes de la UE prevista para el próximo 30 de enero en Bruselas.